/Redacción/
CCOO de Castilla-La Mancha ha asegurado que los datos del paro del mes de mayo reflejan la vuelta a la actividad en la construcción y la logística y evidencian que los trabajadores de estos sectores no estaban cubiertos por el “escudo” que ha supuesto la puesta en marcha de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), sino que habían sido despedidos.
El sindicato ha analizado en una nota de prensa las cifras publicadas este martes por el ministerio de Trabajo y Economía Social, según las cuales, el paro bajó en 5.075 personas en Castilla-La Mancha en mayo, con lo que el total de desempleados se sitúa en 193.944.
La secretaria regional de Empleo y Políticas Sociales de CCOO en la región, María Ángeles Castellanos, ha afirmado que hablar de descenso del paro es “positivo” y más “en tiempos turbulentos” como los actuales, pero ha añadido que si se analizan los datos, éstos dejan al descubierto que existen sectores “muy precarizados y con una elevada temporalidad en los que las empresas han optado por los despidos y no por los ERTE”.
Castellanos ha explicado que el hecho de que la vuelta a la actividad lleve a un descenso del desempleo en la construcción supone que miles de personas fueron enviadas al paro y no han estado en un ERTE, “algo muy vinculado a la precariedad y al abuso de la contratación temporal”, ha denunciado.
Igualmente, ha advertido de que lo mismo ocurre en la logística, un sector que se basa en la contratación mediante empresas de trabajo temporal (ETT) y en el que también durante la crisis sanitaria los trabajadores han perdido su empleo sin pasar por un ERTE.
Además, la dirigente sindical ha subrayado que el “gran impacto” de la construcción y de la agricultura en la bajada del paro, sectores muy masculinizados, ha llevado a que el descenso del desempleo se centre en los hombres, mientras que entre las mujeres apenas varía su situación, lo que hace crecer la brecha de género.
Castellanos también ha manifestado su preocupación por que el incremento del paro afecta más a las personas menores de 30 años y ha lamentado que factores como una mayor temporalidad, los empleos en actividades de temporada y las contrataciones mediante ETT hayan determinado que los jóvenes sean “de los más golpeados” por la crisis en términos de ocupación laboral.
Según las estimaciones de CCOO, el 25 % de los parados menores de 30 años están desempleados como consecuencia de la pandemia.
En este sentido, la responsable sindical ha destacado la necesidad de que los planes de reactivación económica y del empleo den un tratamiento diferenciado a las personas más jóvenes, ya que “no hay forma de construir vidas dignas con bases tan poco sólidas como los empleos temporales de bajos salarios”, ha sentenciado.
