Los farmacéuticos de Albacete muestran la experiencia de su programa para dejar de fumar

/Redacción/

Con motivo de la celebración el día 31 de este mes del Día Mundial Sin Tabaco, el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Albacete quiere hacer un llamamiento a la población para que se conciencie de los peligros que para su salud tiene el tabaquismo que ha pasado a tener la consideración de enfermedad, teniendo en cuenta que el 26,3% de la población albacetense es fumadora. Para ello, ha querido contar en esta ocasión con la experiencia de farmacéuticos albacetenses que ya aplican en sus farmacias desde hace años protocolos de cesación tabáquica, y con algunos de sus pacientes fumadores, que están consiguiendo dejar el tabaquismo.

Hasta llegar aquí en los últimos años el Colegio de Farmacéuticos de Albacete ha venido impartiendo cursos de formación, contando para ello, con la colaboración de profesionales sanitarios del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete, fundamentalmente de Neumología y Atención Primaria, así como de farmacéuticos expertos en abordaje del tabaquismo, para que los farmacéuticos actualizaran conocimientos y se integraran en el Grupo de Abordaje del Tabaquismo creado en el seno del órgano colegial, que ha venido trabajando para la implantación en las farmacias de un servicio de cesación tabáquica que ya está en activo y que a lo largo de este año se ha ido progresivamente potenciando.

Por sus particulares condiciones de cercanía y accesibilidad a la población, las farmacias constituyen un lugar idóneo al que pueden dirigirse los fumadores que hayan decidido dar el paso de dejar de fumar. Una de cada cuatro personas que quiere dejar de fumar recurre al farmacéutico comunitario en su primer intento, el 40% en su segundo intento y en un tercer intento esta cifra alcanza el 46,6%. 

Herminia Panadero, Luis García y Ana Torres son algunos de los farmacéuticos comunitarios de la provincia de Albacete que ya aplican en sus farmacias comunitarias los protocolos de cesación tabáquica con los pacientes motivados para dejar esta adicción considerada una enfermedad, que  supone un gran problema de salud pública y que constituye un gran riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular, enfermedades pulmonares graves y hasta 18 tipos diferentes de cánceres.

Aunque los tres llevan años ayudando a fumadores a dejar el tabaquismo, ha sido desde el inicio de este año, con el anuncio de la financiación de los tratamientos del tabaco por parte del Ministerio de Sanidad cuando han intensificado sus acciones y han llegado a un mayor número de pacientes con este problema de salud. La valoración de todos ello de esta experiencia es altamente gratificante, por la confianza que los pacientes que se ponen en sus manos depositan en ellos, ya que aseguran que el reto de abandonar el tabaquismo es siempre de la persona que lo lleva a cabo.

Coinciden los tres en el lugar idóneo que suponen las farmacias comunitarias para la cesación tabáquica, por su accesibilidad a los usuarios, ya que permite a los farmacéuticos hacer una intervención más larga con los pacientes y un seguimiento de todo su proceso de abandono del consumo de tabaco, ofreciéndole las  herramientas más adecuadas en cada caso para conseguirlo.

Protocolo de actuación.

Muchos han sido las personas fumadoras que este año han dado el paso para superar su enfermedad de tabaquismo, tras varios intentos fallidos en anteriores ocasiones. La financiación de los tratamientos farmacológicos para ayudar a dejar de fumar ha sido una motivación más en este camino, en el que muchos han acudido a sus médicos de Familia y después se han puesto en manos de sus farmacéuticos, donde el protocolo que han seguido estos profesionales comienza con una entrevista personal con el paciente donde se recoge la historia de tabaquismo de cada enfermo, para a partir de ese momento empezar a consensuar un tratamiento con el paciente, que en todo momento, debe estar de acuerdo con cada uno de los pasos que va a dar para conseguir dejar este consumo. 

En función de cada caso, si el paciente requiere apoyo de medicamentos de prescripción médica para dejar de fumar, se le deriva a su facultativo de Atención Primaria con una carta, aunque a veces ocurre al revés, hay fumadores que ya llegan a la farmacia con la receta y lo que buscan es el apoyo y asesoramiento del farmacéutico en este proceso de cesación tabáquica, a través del cual se programan visitas con los fumadores interesados en dejar la nicotina, primero más cortas en el tiempo y después más espaciadas, mediante las cuales el farmacéutico ofrece consejos sobre los beneficios de dejar de fumar, trabaja la motivación con el paciente, las posibles recaídas, y hace un seguimiento durante meses de cada caso.

La mejor manera de ver los resultados de este servicio de cesación tabáquica que ya funciona en algunas farmacias es conocer la opinión de los que se han beneficiado del mismo. Es el caso de Elena Giménez, Francisco Javier García, Elisa García y Esther Jiménez. Los cuatro tienen en común que han dejado el tabaco tras muchos años se sufrir los efectos negativos de la nicotina y que lo han hecho gracias al apoyo de sus farmacéuticos. Están muy contentos del paso dado y esperan que sea el definitivo para superar esta enfermedad. Además, todos afirman que es una de las mejores decisiones que han tomado en su vida y por ello animan a todas las personas de su entorno fumadoras a dar este mismo paso.

A unos les ha costado más este camino hasta dejar de consumir tabaco, con recaídas por el camino, mientras que para otros está resultando más llevadero de lo que pensaban y tratan de calmar la ansiedad con pequeños trucos que de momento les funcionan. Lo que sí ha cambiado en sus vidas es que su salud ha mejorado y esto les ha permitido  poder realizar volver a practicar deporte y saborear más los alimentos.

El Digital de Albacete

Diario digital líder en Albacete con toda la información de la capital y provincia
Botón volver arriba