CORONAVIRUS | ¿Es normal que sintamos miedo a salir a la calle?

/Marta López/

Tras cerca de 50 días confinados en casa comienzan a llegar medidas de alivio que poco a poco nos permiten salir y disfrutar de pequeños paseos al aire libre. Sin embargo, hay quien encuentra reparos en pisar la calle. Así, en medio de una situación tan complicada como la provocada por el coronavirus, la esperada salida no resulta para todos una idea tan agradable.

Es normal tener miedo por diversos motivos”, señala el profesor de Psicología de la UCLM en Albacete, Rafael Morón. Y es que, hay gente que tiene miedo a salir de casa “fundamentalmente por la posibilidad de contagiarse, ya que el que podamos salir de casa no se debe a que el virus no esté, sino a que las condiciones de atención sanitaria han mejorado”, puntualiza.

En segundo lugar, señala que “también hay gente que tiene otro miedo menos funcional y que tiene que ver con la posibilidad de que la Policía le pueda parar y multarlos”, explica. Considera Morón que “al ser algo lioso el proceso de desescalada”, puede ocurrir que los ciudadanos “no estén seguros de si lo están haciendo en el momento que uno debe o en las condiciones exigidas, y de ahí el miedo a una multa”.

Por otro lado, “también es normal experimentar cierto miedo después de llevar tanto tiempo encerrados en casa en estas condiciones”, matiza el psicólogo, porque “el hecho de volver a salir supone un cambio en las rutinas que hemos adquirido durante casi 50 días y esos cambios de rutina siempre nos pueden costar un poquito más”. Unos cambios que se hacen especialmente duros “porque además requieren de numerosas condiciones como el uso de guantes, mascarillas, higiene o el distanciamiento social”, subraya.

De este modo, puntualiza que “el ‘Síndrome de la cabaña’ es algo que está apareciendo ahora como si fuera algo patológico, y en absoluto lo es”, y añade que “se refiere a esas dificultades que podemos tener algunas personas a la hora de cambiar nuestros hábitos después de dos meses haciendo lo mismo y cambiarlos en condiciones que son bastantes complicadas”. Todos estos parámetros pueden llevar a que “algunas personas les pueda costar un poquito más o decidan esperar más para salir a la calle”. Pero Rafael Morón insiste en que “el ‘Síndrome de la cabaña’ no es ninguna patología mental ni mucho menos”.

Igualmente puntualiza que el temor a salir de casa tras tanto tiempo confinados “no se sabe si afecta más a las personas que viven solas o a las que viven acompañadas”. Así, indica que “las personas que viven solas siente mayor necesidad de contacto social”, mientras que las que viven acompañadas “precisan cambiar las personas con las que están en contacto todos los días”.

“Es normal que tengamos miedo”

Asegura Rafael Morón que “el tener ciertos niveles de miedo o ansiedad pueden ser hasta beneficiosos en tanto en cuanto nos permiten tomar las medidas de protección adecuadas”. Sin embargo, esto “deja de ser beneficioso cuando ese miedo nos lleva a evitar salir a la calle y evita que empecemos a integrarnos y a reincorporarnos a la vida cotidiana”, puntualiza.

De este modo, expresa que “es normal que tengamos miedo”, y añade que “es importante normalizar el hecho de que ahora podemos tener miedo”. Asimismo considera que “tener miedo también es natural y no pasa nada por tener ese miedo”.

¿Cómo superar el miedo o el temor a salir a la calle?

La pandemia aún está presente en nuestro día a día y no ha desaparecido, pero debemos tener en cuenta que el miedo no nos puede paralizar, por lo que Morón señala que “lo primero que habría que hacer es normalizar ese miedo y luego, tomando las medidas de protección que las autoridades sanitarias nos recomiendan, ir poquito a poco superando ese miedo”.

Reconoce que no todas las personas manifiestan el mismo nivel de temor, pero quienes tengan mucho miedo a salir de casa, recomienda “ir haciendo, poquito a poquito, salidas que les den determinada seguridad”. Así, reconoce que “a lo mejor no sales a hacer deporte si tienes un miedo muy intenso y que incluso te paraliza, pero puedes empezar por salir a dar una vuelta a la manzana, a comprar el pan o a hacer la compra si no has salido a hacerla en este tiempo”. Por tanto apuesta por hacer salidas que son cercanas y que aunque te pueden dar un poco de miedo, cosa que va a ser inevitable, te aporten más seguridad”. Un proceso paulatino y progresivo en el que “conforme uno se va sintiendo seguro en esas distancias cortas se puede ir aumentado la distancia de la salida”, siempre que cumplamos con la normativa establecida en la Fase de desescalada en la que nos encontremos.

“Partiendo de la base de que todos tenemos o hemos experimentado cierto temor a salir a la calle”, expone el psicólogo, “hay que ir paulatinamente acostumbrándonos y enseñando a nuestra mente que ese temor, a parte de ser fundado, lo vamos superando a base de ir alejándonos y de generar más seguridad conforme vamos saliendo”. Igualmente destaca que “lo que no va a ocurrir es que el miedo desaparezca quedándose la gente cerrada en casa”, porque “si algo tenemos claro en Psicología es que la exposición a lo que tememos es lo único que nos permite superar y afrontar esos estímulos que son amenazantes”.

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