La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha expresado en el Congreso su deseo de que la Comisión Europea (CE) reciba la revisión de su cuadro macroeconómico y el nuevo plan presupuestario que remitirá este jueves «con la responsabilidad y actitud colaborativa» que, considera, debe tener en esta situación de crisis provocada por la pandemia del coronavirus, que han provocado un deterioro de las previsiones: «Ojalá que no se cumplan y decir que la realidad ha sido mejor que la que pinta», ha dicho.
«Esperamos que la Comisión lo reciba con la responsabilidad y actitud colaborativa que se espera en un momento como el que vivimos», ha señalado la ministra, reconociendo que el impacto de la enfermedad Covid-19 en los planes presupuestarios del Gobierno «será notable» y «romperá la tendencia de reducción de déficit que mantenía».
Durante su comparecencia ante la Comisión de Hacienda de la Cámara Baja, a la que ha acudido este jueves para dar cuenta de las actuaciones desarrolladas por su Departamento en esta crisis, la ministra ha señalado que en el Gobierno «no intentan ser optimistas ni pesimistas», y ha recordado que siempre han sido «extremadamente cautos».
«No queremos llevarnos a engaños. Queremos saber exactamente cuál es la situación, y ojalá las previsiones no se cumplan, y decir que la realidad ha sido mejor que la que pinta en un momento no muy preliminar», ha aseverado, destacando cómo algunos organismos han anticipado «cifras absolutamente escandalosas respecto al comportamiento del déficit o la deuda».
Montero ha recordado que hasta el pasado mes de marzo el déficit acumulado se había reducido en un 13,9% en la Administración central. Sin embargo, ha señalado que son números que «pertenecen ya al pasado», ante la emergencia de esta pandemia, pero que, ha reivindicado, «demuestran que el Gobierno estaba gestionando de forma eficiente reduciendo el déficit antes de que irrumpiera de la mayor emergencia sanitaria en más de un siglo».
PIDE «SER CAUTOS PARA NO PROVOCAR ALARMA»
Respecto al cierre del déficit de 2019, del 2,82% del PIB según los datos ofrecidos por Eurostat, frente al 2,64% que marcaba la Intervención General del Estado, dependiente de Hacienda, una cuestión por la que ha sido interpelada por el coordinador económico del PP en el Congreso, Mario Garcés, Montero ha señalado que se debe a un cambio de criterio en la imputación de activos fiscales diferidos (DTA) que no comparte y que este organismo europeo aplica «por prudencia».
En este sentido, ha pedido «ser honestos intelectualmente» y ha rechazado que en el Pleno (del Congreso) anterior alguien habló con tono bastante fuera de lugar». «No creo que ni en las comunidades, ni en ayuntamientos, ni en la Administración General se oculten datos», ha dicho, pidiendo ser «cautos para no provocar alarma». En el Pleno de la semana pasada, el presidente del PP, Pablo Casado acusó al Gobierno de haber «engañado con el déficit», de «mentir» y «ocultar» un desfase de 3.000 millones de euros.
OBSERVÓ «CON PREOCUPACIÓN» EL AUMENTO DE GASTO AUTONÓMICO
Antes, la ministra ha apuntado que la Administración central redujo su déficit, acabando el año con superávit primario, mientras que las comunidades lo incrementaron, pese a incrementar «de forma muy importante» sus ingresos, algo que ha atribuido a que 2019 «es un año particular», al coincidir con elecciones, y «los años preelectorales son complicados».
En este sentido, ha reivindicado que, además del superávit de la Administración central, la Seguridad Social también tuvo un «comportamiento excepcional» por el aumento de ingresos en cotizaciones (atribuido a la subida de bases máximas y de las mínimas con el aumento del salario mínimo) que «compensó todas las medidas que decían de los ‘viernes sociales'».
Sin embargo, la ministra ha reconocido que observó el cierre del ejercicio «con preocupación» por parte del comportamiento de algunas comunidades autónomas ante un «punto de inflexión» en la reducción del déficit, puesto que pese a aumentar en un 3,3% sus ingresos, los gastos se dispararon un 5,1%. «No se puede mantener ese ritmo en una serie razonable. Quiero pensar que fue excepcional», ha dicho.
VE NECESARIA «UNA INTERVENCIÓN DECIDIDA Y VALIENTE» EN EUROPA
En este punto, la ministra de Hacienda ha señalado que esta situación «requerirá de una intervención decidida y valiente de las autoridades comunitarias» y, si bien ha puesto en valor los «importantes avances» en la UE, ha lamentado como «insuficiente» la «triple red de seguridad de en torno a 550.000 millones para actuaciones a nivel del Estado, las empresas y los trabajadores».
«No es suficiente. Necesitamos más ambición y celeridad para que cuando consigamos atajar la crisis sanitaria y se inicie la desescalada, podamos relanzar la economía», ha dicho Montero, que ha asegurado que el objetivo del Gobierno es hacerlo «sobre la base de la transición ecológica y la revolución digital, sin olvidar sectores tradicionales fuertes, como el turismo o el transporte».
La titular de Hacienda ha reivindicado que la postura española ante Bruselas pasa por la creación de un fondo para la recuperación, de entre un billón y 1,5 billones de euros, que incluyan transferencias no reembolsables «que eviten el sobreendeudamiento» de los países.
Montero ha asegurado que «Europa no se puede desentender de una situación tan grave» y, aunque ha celebrado los avances, ha señalado que estos no son «posiblemente al ritmo que a España le gustaría». «Pero hemos conseguido un consenso que hasta hace unos días parecía impensable», ha remarcado.