El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha anunciado que su Consejo de Gobierno va a aprobar el próximo martes la compra de un total de 22 millones de mascarillas para afrontar lo que ha denominado como la «fase de convivencia» con el COVID-19.
En rueda de prensa tras la reunión mantenida con otros presidentes autonómicos y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reparado en que esta crisis «no se va a acabar mañana», razón por la cual hay que empezar a tomar «decisiones».
Toda vez que «no se puede estar en casa sin producir», algo que entiende que «no es saludable», ha apostado por «equilibrar poco a poco el confinamiento».
Estas mascarillas podrían repartirse incluso a domicilio a todos los castellanomanchegos en colaboración con los ayuntamiento, aunque en todo caso «no se trata de suplir la compra que pueda hacer cada uno».
Así, ha enfatizado que todo «esfuerzo» de cara a la compra de mascarillas que pueda realizar cada ciudadano, «será necesario».
LOS CASOS CRECERÁN POR NUEVO PROTOCOLO DE CONTEO
De su lado, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, que ha ofrecido los datos de este domingo sobre la afección del coronavirus en la región, ha advertido que a partir de este lunes los casos crecerán en número.
En este sentido, ha explicado que en la tarde noche de este sábado el Ministerio de Sanidad publicó en su web el protocolo que establece qué es un caso y qué es un caso confirmado. «Ahora empezamos a contar y sumamos a las PCR positivas los test rápidos positivos», ha indicado.
«Eso no querrá decir que tenemos más o menos casos porque ya los venimos teniendo y haciendo test, y en el caso de Castilla-La Mancha fuimos de las primeras que nos pusimos a hacer test rápidos, ya son casi 10.000 en una semana, que se suman casi a los más de 29.000 PCR», ha manifestado.