/Llanos Esmeralda García/
Numerosas albaceteñas se han puesto manos a la obra para ayudar con máquina e hilo de coser en la fabricación de mascarillas artesanales ante la necesidad de este material tan básico en plena crisis del coronavirus. Desde el taller de costura en la ciudad de Albacete Textilia y Cia, regentado por dos hermanas, Marisa y Llanos, han coordinado a sus alumnas a través de Whatsapp, debido al actual estado de alarma, para hacer mascarillas de tela aprovechando este material del que habitualmente hacen uso y que ahora servirá como medio preventivo de transmisión del coronavirus en el trabajo de profesionales sanitarios así como para ciudadanos que tienen que acudir a hospitales, residencias o trabajadores de supermercados, entre otros.
“La idea ha surgido ante la necesidad que están demandando los trabajadores del Hospital General y en el centro San Vicente de Paúl y que nos han trasladado alumnas que trabajan ahí”, señala Marisa Cebrián a El Digital de Albacete, precisando que estas mascarillas no son para sustituir las filtrantes que los profesionales sanitarios utilizan si no que con las caseras pretenden evitar “contagiar a los demás y se puedan volver a utilizar ya que son de algodón 100%, tanto el exterior como aquellas que llevan guata, y se puedan esterilizar”. Y es que no sólo las están elaborando para enfermos de coronavirus, también para otros servicios, como consultas, zonas de oncología, neonatos… apunta Marisa “puesto que no están teniendo las mascarillas que necesitan, no digo que no haya servicio de ellas”.
En este sentido, el gobierno regional comunicaba este mismo lunes que han “adquirido más equipos de protección pero queremos tener más” y por eso el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, hacía “un llamamiento a todas las personas, colectivos y a la industria que pueda prestarnos ese material”.
Con algo tan sencillo como mensajes a través de sus grupos de WhatsApp Marisa ha pasado los patrones e instrucciones a sus alumnas para poder hacer estas mascarillas caseras realizadas con tanto amor. “Nos hemos puesto en contacto con todas nuestras alumnas y les hemos preguntado si querían colaborar. Les hemos facilitado dos patrones, dependiendo de su habilidad”, y ahora insiste Marisa “están todas en casa cosiendo”. Además a estas alumnas también se les ha explicado el siguiente paso que tienen que realizar una vez las elaboren, “lavarlas a 60 grados e incluso antes de salir de casa plancharlas a alta temperatura para intentar que salgan lo mejor y lo más esterilizadas posible”, incluso matiza Marisa que quizás en el hospital las tendrán que esterilizar de nuevo, “nosotras colaboramos en todo lo que podemos”.
El ciclo de solidaridad no termina en casa de estas albaceteñas y es que una vez acabadas, explica Marisa, en el momento en el que tengan una partida importante “nos pondremos de nuevo en contacto con nuestras alumnas que las necesiten, nos coordinaremos para dejarlas en un sitio en concreto o si alguien las pudiera recoger”. Lo importante, señala esta albaceteña, es que “vamos a seguir al pie del cañón cosiendo mascarillas para llegar a todo el que podamos”.
Marisa apela a la solidaridad ciudadana para que todos los albaceteños “puedan hacer mascarillas puesto que hay mucha tradición de costura en Albacete” y ayudar de forma altruista con algo tan sencillo.
