En este bar de Castilla-La Mancha no vendían solo cañas y tapas

/Redacción/

La Policía Nacional ha desmantelado un establecimiento de hostelería de Talavera de la Reina (Toledo) que funcionaba como “punto negro” de venta de sustancias estupefacientes al hallar durante un registro un total de 144 dosis de cocaína dispuestas para su venta.

La requisa tuvo lugar el pasado 18 de diciembre cuando, gracias a un dispositivo enmarcado en la Operación Vigilia, los investigadores detectaron que había indicios de que se estaba traficando con sustancias ilegales en el citado establecimiento.

De hecho, cuando accedieron en el interior del bar, hallaron 131 dosis de cocaína dispuestas para su venta en forma de papelinas que estaban ocultas en un doble fondo del suelo del local, y otras 13 más en el interior de un envase de desodorante, ha informado la Policía en un comunicado.

En total, 96,1 gramos de cocaína, además de 1.470 euros en metálico y los documentos de la contabilidad relacionada con la venta de la droga. Por este motivo se detuvo tanto al camarero habitual del establecimiento como al responsable del mismo. Ambos contaban con antecedentes por delitos contra la salud pública, y fueron puestos a disposición judicial.

La Operación Vigilia, que se ha desarrollado durante los últimos meses de 2019, ha consistido en varias actuaciones policiales contra el tráfico de estupefacientes a pequeñas escala en locales de ocio nocturno de la ciudad y forma parte del Plan Estratégico de Respuesta Policial al Consumo y Tráfico Minorista de Drogas en Zonas, Lugares y Locales de Ocio, establecido por la Secretaría de Estado de Seguridad.

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