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UGT Castilla-La Mancha ha mostrado su satisfacción tras la investidura de Pedro Sánchez como presidente y ha asegurado que se configurará un Gobierno “progresista y valiente” para afrontar los problemas que preocupan a la mayoría social.
En declaraciones a Efe, la secretaria de la Federación de Servicios Públicos de UGT Castilla-La Mancha, Carmen Campoy, ha celebrado que “por fin” este martes ha salido adelante “un gobierno progresista y valiente”, que no antepone “los intereses de los que quieren incrementar su cuenta de resultados a costa de la pérdida de derechos de los trabajadores”.
La dirigente sindical ha destacado la importancia de contar con este nuevo Ejecutivo para “recuperar el equilibrio en las relaciones laborales” y llevar a cabo “un trabajo profundo” en cuestiones como el empleo, las pensiones, la vivienda, los salarios y los servicios sociales.
En este punto, ha hecho un llamamiento a la responsabilidad de todos los partidos para “potenciar el diálogo”, terminar con “el bloqueo y la crispación” y poner encima de la mesa “voluntad para alcanzar grandes pactos a través del consenso”.
La dirigente sindical ha hecho hincapié en que para iniciar cualquier tipo de negociación hay que trabajar primero en un nuevo Estatuto de los Trabajadores y derogar las dos últimas reformas laborales, de las que ha dicho que han sido “muy dañinas”, en especial la de 2012, ya que ha llevado a la precariedad laboral.
Además, ha abogado por un mejor reparto de la riqueza y por garantizar una vida digna a los trabajadores, incrementando el salario mínimo interprofesional, al menos, hasta los mil euros en todos los convenios.
“Ahora tenemos trabajadores que hacen su labor pero no tienen una vida digna porque tienen un salario que no les permite salir de la pobreza”, ha denunciado Campoy.
Igualmente, ha apostado por vincular la revalorización de las pensiones al IPC y por seguir avanzando en políticas de igualdad y en la protección de las mujeres y del colectivo LGTBI.
