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Los hechos ocurrieron en agosto de 2018 en Fano, localidad cerca de Gijón, cuando la familia Menéndez, conocidos empresarios relacionados con la fabricación de sidra, sufrieron un violento robo en su domicilio y además lo vivieron en primera persona ya que fueron tomados como rehenes varios miembros de la familia mientras los malhechores se apropiaban de un buen botín.
Según recoge el asturiano diario ‘El Comercio’ en su edición digital, fue en la noche del 16 de agosto de 2018 cuando un grupo de personas “encapuchadas y armadas” accedieron a la vivienda del empresario por “una ventana que se encontraba abierta” mientras en el inmueble se encontraban «el empresario, su mujer, su suegra y su hija», a los que «maniataron y amordazaron» mientras cometían el robo.
El botín con el que se hicieron los presuntos cacos ascendería a “8.000 euros entre dinero en metálico y joyas”, llevándose también “un vehículo de la familia” que usaron para su huida, indica la publicación asturiana al mismo tiempo que añade que, en el robo los presuntos ladrones “emplearon gran violencia, golpeando al empresario y amenazando al resto de rehenes con navajas en el cuello para que les dijeran donde estaba la caja fuerte”. Antes de huir «pusieron la tele a todo volumen y rompieron el mando contra el suelo», para que no pudieran oírse sus gritos pidiendo ayuda mientras los ladrones escapaban del lugar.
Fue la suegra del empresario la que consiguió liberarse de sus ataduras y rescatar al resto de rehenes, tras lo que pudieron pedir auxilio.
En lo que a los presuntos ladrones respecta, parte de ellos fueron detenidos ‘in fraganti’ por la Guardia Civil tras asaltar dos empresas sidreras en Villaviciosa y otros presuntos miembros de la banda criminal fueron arrestados meses después en Albacete.
El caso está a punto de llegar a los Tribunales y es ahora cuando se ha sabido que Fiscalía pide 7 años de cárcel para los presuntos asaltantes de la vivienda de la Familia Menéndez.