El Alba mereció más en Ponferrada

/Nacho López/

El Albacete Balompié ha sumado un punto en su desplazamiento a El Toralín y lo ha hecho tras cuajar un buen partido y haber merecido mucho más en su desplazamiento a tierras bercianas. El Torito Acuña adelantó a los de Ramis en el minuto 9 de partido, llegando el empate mediada la segunda mitad desde el punto de penalti en una acción más que dudosa y discutida.

Después de su pinchazo en casa ante el Mirandés, el Alba regresaba este sábado a la competición y lo hacía en un siempre complicado estadio de El Toralín para medirse a una SD Ponferradina que se agarra con fuerza a la permanencia un año más en Segunda ocupando posiciones de mita de la tabla a pesar de ser un recién ascendido.

Para tal cita y con muchas bajas, entre ellas la de Zozulia, Ramis tuvo que confeccionar un once prácticamente de circunstancias y conformarse con un banquillo en el que además de dos canteranos, poco o nada de pólvora como tal había en él.

Así pues, Tomeu Nadal estuvo en portería; Alberto Benito en el lateral derecho, Fran García en el izquierdo y Álvaro Arroyo y Kecojevic, en el centro de la defensa; el doble pivote fue para Eddy Silvestre y Karim Azamoum, estando acompañados en la medular por Pedro Sánchez en la banda diestra y Néstor Susaeta en la siniestra; arriba, con la responsabilidad del gol sobre sus hombros desde el inicio, estuvieron el ‘Torito’ Acuña y Manu Fuster. Para el banquillo quedaron Brazao como portero suplente, Barri, Capezzi, Olabe, Dani Ojeda y los canteranos Fer Navarro y Castillo.

Ambos equipos se mostraron muy temerosos en el arranque de partido y el duelo comenzó discurriendo por el centro del campo, con continuas trabas y con intensidad defensiva, pero Susaeta, Pedro y Acuña, en el minuto 9, hicieron pedazos el entramado inicial de los de Jon Pérez Bolo con un cambio de orientación de Susaeta a Pedro y con la internada por banda del alicantino, que puso una magnífica asistencia al área que el ‘Torito’ Acuña no perdonó y alojó en el fondo de las mallas del conjunto rival. El gol llegó con suspense, ya que en un principio el gol fue anulado por un presunto fuera de juego, pero tras consultarlo con el VAR, Gorostégui Fernández dio validez al tanto después de ver las imágenes y el 0-1 subió al marcador de El Toralín.

No pudo comenzar mejor el encuentro para los de Ramis, adelantándose a las primeras de cambio en un feudo donde se suelen ver pocos goles por parte de unos y de otros y haciéndolo en un momento en el que nadie dominaba, viniendo el tanto derivado de una imprecisión de Son, lateral de la ‘Ponfe’, que propició el inicio de la jugada del gol y ante el que Pedro comenzó a sacar petróleo antes de conectar con Acuña.

Con el 0-1 en el marcador el panorama sobre el verde no varió los derroteros por los que discurría antes de que Acuña perforara la meta blanquiazul, no mostrando la Ponferradina más presencia en ataque y no incomodando a un Albacete Balompié que se movía a la perfección en el escenario y que se mostraba cómodo en defensa y muy peligroso a la contra.

El Alba cerraba muy bien los espacios y desesperaba a la Ponfe, a la que el peso de la responsabilidad de tener que llevar la iniciativa en el partido por aquello de ir por detrás en el marcador le hacía más daño que reportarle beneficios y llegados al minuto 30 de juego, el 0-1 no se había visto amenazado y Tomeu Nadal era casi un espectador de lujo.

Pedro pudo aumentar distancias en el marcador en el minuto 31, con un duro disparo desde fuera del área cargado de malas intenciones y ante el que solo un ‘paradón’ como el que realizó Caro pudo evitar que no fuera gol, pero desafortunadamente para los intereses de los de Ramis, el ex del Alba estuvo inspirado bajo palos y con su magnífica intervención dejó con la miel en los labios a la expedición albacetista, que por un momento imaginó el 0-2 a tenor de la trayectoria del balón.

El Alba no pasaba apuros, tenía el partido controlado y además era el que generaba peligro en área contraria, intentando ser incisivo para ampliar rédito pero sin despistarse lo más mínimo en unas tareas defensivas en las que hasta el momento el equipo se había mostrado muy efectivo.

Tras dos minutos de añadido, el colegiado del encuentro decretó el final de la primera mitad y los jugadores encararon el túnel de vestuarios con el 0-1 a favor del Albacete Balompié luciendo en el marcador.

La segunda parte comenzó con los mismos protagonistas que lo hizo la primera y con muchas faltas por parte de unos y de otros, haciendo el juego muy trabado y tentando quizá demasiado la suerte en algunas ocasiones futbolistas que ya estaban amonestados en las filas del Albacete Balompié.

En el minuto 56 la Ponfe encontró portería por mediación de Yuri, pero el veterano delantero lo hizo en posición antireglamentaria y fue anulado por el colegiado a instancias de uno de sus asistentes al igual que en el caso del que marcó el ‘Torito’ Acuña en la primera mitad, sin embargo, y afortunadamente para el Alba, en esta ocasión el VAR confirmó el acierto del asistente y la posición más adelantada del delantero de la Ponferradina, por lo que el tanto no subió al marcador y el 0-1 se mostró inamovible.

Manu Fuster pudo haber matado el partido en el minuto 62 tras una asistencia de Alberto Benito desde banda diestra, pero el joven delantero no pudo conectar como a él le hubiera gustado con el esférico y no pudo aprovechar la franca ocasión para ampliar distancias batiendo a Caro.

El Alba estaba haciendo un buen partido en El Toralín y con el viento a favor del 0-1, los de Ramis estaban cómodos en el terreno de juego y estaban siendo dominadores del esférico y del partido, quedando únicamente en arreones y jugadas aisladas las aproximaciones de la Ponferradina a las inmediaciones de Tomeu Nadal.

Sin embargo, el fútbol tiene estas cosas y en el minuto 66 una de esas jugadas aisladas terminó obligando a realizar un paradón a Tomeu Nadal y en el rechace, un jugador de la Ponfe se fue al suelo y desde los once metros tras decretar el árbitro penalti, Yuri puso el empate a uno en el marcador y dejó con cara de resignación a un Alba que merecía más y que veía como la Ponfe le estaba birlando dos puntos. El árbitro no consultó el VAR, pero las imágenes de televisión dejaron muchas dudas de que la decisión del árbitro fuera acertada. Tras el gol, Dani Ojeda sustituyó a Acuña en lo que fue el primer cambio del Alba.

El equipo no bajó los brazos tras el gol en contra y el 1-2 merodeó en varias ocasiones la meta defendida por Caro, pero el ex del Alba tenía la tarde inspirada y se estaba convirtiendo en uno de los mejores de su equipo con sus intervenciones y en culpable directo de que el Alba no fuera ganando llegados a esta altura de partido en El Toralín.

Ramis realizó su segundo cambio llegados al minuto 80, retirando del terreno de juego a Karim Azamoum y dando entrada a Roberto Olabe, para seguir dando consistencia al doble pivote e intentar dar algo más de creatividad al centro del campo.

A falta de dos y minutos y medio para llegar al 90, Dani Ojeda perforó la portería de Caro y en un principio el colegiado lo anuló, consultando después las imágenes en el VAR y reiterando su decisión de no dar validez al que habría sido el 1-2. Tras la acción, Ramis agotó los cambios dando entrada a Barri en detrimento de Manu Fuster.

Cinco fueron los minutos de añadido que decidió otorgar el colegiado de la contienda y en ellos la emoción fue máxima, estando todo en juego hasta el pitido final y en el que el reparto de puntos fue el resultado final. El Alba mereció más en El Toralín.