/Redacción/Fotos: Ángel Chacón/
Desde el pasado día 8 y hasta el próximo 24 de noviembre, el Ejército de Tierra está desarrollando el Toro 19, su ejercicio principal anual en el ámbito específico de Tierra (ET).
El ejercicio se inició entre los meses de septiembre del 2018 y enero del 2019 con una 1ª etapa en la que se desarrolló el concepto y las especificaciones del mismo. En la 2ª etapa, de enero a octubre de este año se llevó a cabo el planeamiento y, actualmente esta 3ª etapa es la de conducción del ejercicio que incluye el despliegue, desarrollo de las operaciones tácticas y repliegue de las fuerzas participantes.
Bajo el mando de la División Castillejos, participan cerca de 6000 efectivos con 750 vehículos y 12 helicópteros, en un ejercicio que está enfocado a ejecutar diferentes misiones para mejorar el adiestramiento desde nivel división hasta nivel grupo táctico.
La ejecución del ejercicio Toro 19 se realiza simultáneamente en diferentes localizaciones: Campo de Maniobras de San Gregorio (Zaragoza), Campo de Maniobras de Chinchilla (Albacete), Base Jaime I (Bétera, Valencia), Base General Menacho (Bótoa, Badajoz), Base General Morillo (Pontevedra), Base Cabo Noval (Asturias) y zona de los Monegros (Zaragoza-Huesca) , lo que refleja la envergadura, el grado de dificultad en la coordinación de las actividades que se desarrollen y el esfuerzo logístico que lleva implícito.
Este domingo alrededor de 1.200 efectivos de la Brigada Paracaidista han participado en una operación de asalto aéreo en el Centro Nacional de Adiestramiento de Chinchilla (Albacete) , donde se concentran los efectivos de la Brigada Almogávares I de Paracaidistas.
El escenario en el que está basado el ejercicio TORO19 se desarrolla en un país ficticio (SKOLKAN) que ha solicitado apoyo internacional a la OTAN tras ser invadido parte de su territorio por un país con reivindicaciones territoriales sobre el mismo.
El ejercicio que desarrolla la División Castillejos es de combate convencional con la misión de restaurar la integridad territorial y la seguridad de un país aliado de la OTAN, ayudándole a recuperar la gobernabilidad y de esta manera demostrar a la comunidad internacional la firme voluntad de la OTAN de apoyar a sus países aliados.
Este ejercicio supone para la BRIPAC otra oportunidad para incrementar su nivel de preparación para poner a disposición del Ejercito de Tierra una Gran Unidad de Respuesta Inmediata, especialmente preparada para el combate en las tres dimensiones, con un elevado grado de morar y cohesión, que garantice la disuasión y contribuya a la libertad y seguridad de los españoles.
El Ejército de Tierra realiza anualmente un ejercicio principal de adiestramiento general. Con ello se persigue mantener y mejorar el grado de interoperabilidad de todas las unidades participantes.
Su finalidad es testar su preparación, disponibilidad y operatividad para adaptarse a todo tipo de escenarios y proporcionar las capacidades decisivas para defender los intereses de España y de nuestros aliados, en un entorno operativo presente y futuro donde el carácter de las operaciones terrestres será decisivo, y para ello es de suma importancia de contar con un ejército perfectamente preparado para poder afrontar todos los retos presentes y futuros que se puedan requerir.
El escenario planteado en el ejercicio Toro 19, permite que el adiestramiento de las unidades participantes se pueda orientar a las acciones ofensivas que se desarrollan en conflictos de alta intensidad, en una operación de combate generalizado, contra un enemigo similar (“peer to peer”). Igualmente, permite desarrollar actividades orientadas a incrementar la interoperabilidad y la capacidad de integrarse en estructuras multinacionales.
