/Marta López/Fotos: Ángel Chacón/
Al grito de “¡Basta ya de justicia patriarcal!” y “¡No es abuso, es violación!” cerca de 150 personas se congregaban a las puertas de los juzgados de Albacete para mostrar su repulsa a la sentencia de la ‘manada de Manresa’.
La Audiencia de Barcelona daba a conocer el pasado 31 de octubre las penas impuestas a los integrantes de esta nueva ‘manada’. En concreto, la sentencia condena a penas entre 10 y 12 años de prisión a los cinco acusados de una violación múltiple a una menor en Manresa, y les condena por un delito de abuso sexual a menor, a pesar de que Fiscalía al final del juicio acusó por agresión sexual. Además, las justicia absolvía a un sexto integrante que “se masturbó mientras ocurrían los hechos”.
Los hechos ocurrieron en 2016 en Manresa, cuando un grupo de jóvenes acudió a una fábrica abandonada para realizar un ‘botellón’. Un grupo abusó de una menor que había tomado alcohol y consumido tóxicos y se encontraba en estado de inconsciencia, informaba el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya. Así, el tribunal considera que se trata inequívocamente de un delito de abuso sexual al quedar demostrado que la víctima estaba inconsciente y «sin poder determinarse y aceptar o oponerse a las relaciones sexuales», aunque no ve violencia o intimidación en los hechos.
Así, desde la Coordina 8-M Albacete, integrada por varios colectivos feministas, daban lectura a un manifiesto “en solidaridad con la víctima de esta violación”. De este modo, recordaban que “la misma sentencia recoge que se trató de un acto extremadamente intenso y especialmente denigrante”.
Por tanto, manifestaban que “urge el cambio legal que venimos demandando para que se tipifiquen todas estas conductas como delito de agresión sexual”, explicando que lo determinante debe ser “a existencia o no de consentimiento expresado de forma directa o indirecta y en cuya mayor o menor gravedad dependa de las circunstancias concretas que concurran”. Durante esta concentración, aseguraban que “es necesario que toda la sociedad se implique para acabar con las ideas destructoras que alimentan esta forma de violencia de género”.
Consideran que a día de hoy se trata a las mujeres “como meros objetos de los que se puede disponer prescindiendo de su voluntad, cuya obligación es complacer los deseos masculinos al margen de los propios”. Además, destacaban “la existencia de una doble moral que castiga la libertad sexualidad de las mujeres”.
Movilizaciones que se están sucediendo este lunes en toda España para protestar contra la sentencia de ‘la manada de Manresa’, en la que piden que la condena reconozca la agresión sexual y no solo el abuso. Con esta nueva sentencia, colectivos feministas quieren volver a las calles, recuperando el lema ‘No es no’, que protagonizó las movilizaciones que surgieron a raíz de la publicación de ‘La Manada de los Sanfermines’ en 2016.
Ahora, las feministas vuelven a las calles de Albacete para protestar contra “la justicia patriarcal y reivindicar que el consentimiento sexual debe ser expreso. Piden así, una reforma de los delitos sexuales previstos en el Código Penal, haciendo hincapié en que “sólo sí es sí”. La publicación de la sentencia de ‘la manada de Manresa reactiva esta polémica, en la que piden que se suprima el abuso sexual y se condene como agresión toda relación sexual sin consentimiento.