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Mañana se conmemora el Día del Daño Cerebral Sobrevenido, y con motivo de tal fecha ADACE, la asociación que trabaja con los afectados y las afectadas y sus familias, ha celebrado su tradicional acto de visibilización de la enfermedad en el Salón de Actos de Perpetuo Socorro.
El encuentro, que ha finalizado con la lectura del manifiesto por parte de una usuaria, ha contado con la asistencia de la diputada provincial de Servicios Sociales, Juani García, el alcalde de Albacete, Vicente Casañ, el director médico del SESCAM, Alberto Sansón, la neuropsicóloga, Llanos Marcilla, representantes de diferentes grupos políticos y del ámbito médico.
Durante su intervención, la responsable provincial ha hecho referencia al lema de la campaña de este año explicando la importancia de que una vida salvada sea vivida de manera digna y con la mayor de las oportunidades posibles. En ese punto, que llega cuando el trabajo directo de los profesionales sanitarios termina, es donde asociaciones como ADACE cobran importancia “por ser fundamentales para esa comprensión y ayuda mutua que necesitan tanto pacientes como familiares y por ser una entidad clave para la inserción laboral o educativa de los afectados”. Motivos que le han llevado a asegurar la continuidad del apoyo de la institución provincial a ADACE, valorando el trabajo que ésta realiza en el conjunto de la provincia desde los pisos tutelados de Albacete y Almansa, así como “en cualquier lugar donde surja la necesidad. “Las instituciones no podemos más que apoyar”, ha remarcado García.
La diputada provincial ha recordado que todos (sin importar la edad) estamos expuestos a un accidente cerebrovascular por lo que también ha querido felicitar a los profesionales sanitarios que atienden a estas personas y poner en valor los esfuerzos que el Hospital realiza a través de la Guía de Buenas Prácticas. Iniciativa liderada por el Servicio de Enfermería y cuyo objetivo es que, además de sobrevivir, los pacientes tengan la mayor calidad de vida posible.
García también se ha felicitado por contar en Albacete con la Escuela de Pacientes. Recurso gracias al cual se forma a las familias para empoderarlas a la hora de realizar los cuidados de los pacientes en casa.
Por su parte, el director médico del SESCAM, Alberto Sansón, ha agradecido a ADACE-CLM su trabajo de concienciación y la abrumadora labor que llevan a cabo, destacando su programa de formación y empleo, y el de prevención de DCS.
Sansón ha incidido además en la importancia que el trabajo de los voluntarios tiene para dar atención a una persona con una lesión cerebral que le provocará daños cognitivos, físicos y de conducta. Situación, ha recordado, que afecta al paciente pero también al núcleo familiar “y nos pone sobre la mesa la fragilidad la que estamos todos sometidos. Un día estamos perfectos, y al día siguiente todo es una pesadilla”, ha dicho.
El alcalde de Albacete, Vicente Casañ, ha comprometido el apoyo municipal a ADACE, “por ser la extensión del brazo donde las administraciones no pueden llegar”, y ha valorado el trabajo que realizan convirtiéndose en una segunda familia para las personas afectadas y para su núcleo más cercano.
El acto ha finalizado con la lectura del manifiesto, un texto titulado ‘Te puede pasar a ti, nos puede pasar a cualquiera’, que recuerda que al año unas 100.000 personas se enfrentan a cambios radicales en su proyecto de vida causados por Daño Cerebral Sobrevenido, y que tiene entre sus demandas principales el desarrollo de una estrategia nacional de atención al daño cerebral sobrevenido (DCS), la creación de la categoría diagnóstica ‘Daño Cerebral Adquirido’ en la que se fijen las necesidades y criterios de atención; la elaboración de un censo de personas con esta situación que permita analizar las necesidades de atención que merecen en base a garantizar una mejor calidad de vida e inclusión social; que se considere a la familia como parte beneficiaria en el proceso de atención y que los planes sociales y sanitarios reflejen las necesidades específicas de las personas con mayor vulnerabilidad debido a un daño cerebral severo, menores con DCA, o personas con alteraciones de la conducta.
