/Marta López/Fotos y Vídeo: Ángel Chacón/
Las llamas de 5.000 antorchas iluminaban Albacete en la Noche de San Juan, la velada más corta del año en la que sin duda, el fuego ha sido el gran protagonista. Un fuego purificador, con el que los vecinos de la capital quemaban los malos augurios y daban la bienvenida al verano, mirando al futuro con positividad.
Así, antorcha en mano, emprendían su camino desde la Catedral, recorriendo las calles de la ciudad hasta llegar a la tradicional hoguera ubicada en los Redondeles de la Feria. Una vez frente a la gran hoguera, los albaceteños quemaban malos recuerdos, problemas y experiencias negativas; al tiempo que tenían presentes sus mejores deseos.
Una espectacular imagen de miles de antorchas recorriendo la ciudad que será difícil de olvidar para el alcalde de Albacete, Vicente Casañ, ya que esta es su primera noche de San Juan como primer edil de la capital. Por este motivo, subrayaba que se trata de “un día muy especial”, destacando la importancia de festejar el día del patrón de Albacete. “Este Equipo de Gobierno tiene las cosas muy claras”, explicaba Casañ, añadiendo que “queremos mirar hacia el futuro, pero sabiendo cuáles son las tradiciones más arraigadas en nuestra ciudad”. Así, manifestaba que esta noche “en nuestra hoguera particular queremos quemar los malos augurios”, animando a los albaceteños a participar en esta mágica noche. Orgulloso de las raíces de la capital, Vicente Casañ concluía con un contundente: “Que viva San Juan y que viva Albacete”.
Por sumarte, el vicealcalde de la capital albaceteña, Emilio Sáez, se refería al fuego de la noche de San Juan como “renovador y purificador”, palabras con las que también definía “el espíritu y el sentimiento de la nueva Corporación Municipal”. De esta manera, animaba a los albaceteños a “participar masivamente en esta noche de San Juan”, y a hacerlo “en familia, llevando las antorchas hasta el Recinto Ferial”, tal y como marca la tradición.
Las antorchas, poco a poco crearon una gran hoguera, que ha sido controlada en todo momento por Protección Civil y Bomberos de Albacete, quienes refrescaban el fuego para que no se intensificara. Además, efectivos de la Policía Local, han velado por la seguridad durante todo el recorrido, en lo que ha sido una noche que ha transcurrido con total normalidad y sin incidentes.
El fuego de la hoguera daba paso a la pólvora, y es que un asombroso castillo de fuegos artificiales iluminaba el cielo de Albacete y congregaba ante la Puerta de Hierros a niños y mayores para disfrutar del espectáculo pirotécnico.
Este año, la verbena de San Juan volvía al Recinto Ferial, tras finalización de las obras de remodelación del mismo. Una cita que no se concibe sin el tradicional reparto de rollicos de anís y Paloma Sanjuanera, y en la que los albaceteños daban la bienvenida al verano entre un ambiente de lo más festivo.
