Casi un centenar de personas para arropar al designado por el Club Rotario de Albacete como servidor público del año 2018. El elegido: Joaquín Coy García.
No fue una convocatoria al uso, fue una noche de grandes hombres de distintas profesiones que arroparon a Joaquín en una noche emocionante para él.
El ambiente propicio incluso para seguir hablando de futuro, de pactos, de acuerdos para la designación del alcalde de Albacete. En la mesa de cabecera el alcalde en funciones de Albacete, Manuel Serrano y también el número 1 de la lista del Psoe, Emilio Sáez, uno de ellos será el alcalde de Albacete el próximo día 15 si nadie ni nada lo impide. Podemos y Ciudadanos también estuvieron representados. Ambiente cordial, aunque la procesión lógicamente irá por dentro. Mucha mano izquierda, las formas correctísimas, las ilusiones intactas y algún comentario muy superficial si entrar en detalle porque aquí no hay nada decidido.
Cada vez soy más partidario de una segunda vuelta electoral para dirimir con claridad el futuro de los ayuntamientos. De momento, hay lo que hay y Ciudadanos tiene la palabra.
La semana próxima será decisiva y habrá fumata.
Fue una noche en el Restaurante El Callejón en la que el premiado Coy acaparó los elogios porque lo tiene bien merecido.
Con el riesgo de dejarme nombres en el olvido fue una noche de grandes servidores públicos. Compartí mesa con Eduardo Salinas, magistrado del Tribunal Superior de Justicia de CLM, personal afable y de extraordinaria sencillez. Me facilitó el acta de designación del Club Rotario de Albacete. Otro día me gustaría preguntarle por el juicio del procés, su opinión, lo de los peritos judiciales que no contempla nuestro ordenamiento jurídico. En fin, para saber algo más de lo que se está viviendo en el Tribunal Supremo durante estos días.
Siempre hay una letra pequeña que personas con conocimiento como Eduardo saben descifrar.
El fiscal, Juan Pedro Guillén, compartimos afición taurina y con él es fácil tratar cualquier asunto. Una persona con prestigio en la fiscalía, ganado año tras año de profesión. Su vinculación con Albacete es plena desde hace años, aprovecha los descansos o fines de semana para desplazarse al Jaén de su alma. Lo hemos comentado alguna vez, nunca dejará de estar en Albacete, aunque tenga que compartir con esa zona de Linares que tan feliz le hace en sus momentos de sosiego. No habrá que tardar mucho para organizar un acto en el que se le puedan trasladar las muestras de afecto que él se ha ganado.
Luis Natalio Cuesta, inspector de policía y uno de los presidentes de la Plaza de Toros de Albacete. A Luis hay que quererlo a la fuerza, transmite bondad, generosidad y va de frente.
Luis es de esos amigos a los que apetece encontrarte, aunque solo sea para darle un abrazo.
Genoveva Armero, inspectora de policía y adscrita al equipo presidencial de la Plaza de Toros de Albacete, tiene capacidad, conocimiento y ganas para además de dedicarse a su profesión tener tiempo para las tareas taurinas encomendadas. Su bonhomía la delata.
Ahora asumirá también la responsabilidad de la relación con los medios de comunicación, como jefa de prensa en la Comisaria de Albacete. Sabrá hacerlo, no es tarea fácil.
Desde hace muchísimo tiempo la Comisaria de Albacete ha tenido un puñado de inspectores de policía brillantes, he conocido a unos cuantos y doy fe de ello.
Lo mejor que le puede pasar a un inspector de policía o a cualquier servidor de lo público es ser querido y respetado.
En la cena saludé también a Eutimio Candel, si tuviese que poner un ejemplo de hombre bueno citaría a Eutimio. Ramiro, otro tipo muy respetable con el que hablar de toros es una delicia.
Me salen unos cuantos nombres de lo que les cuento: Joaquín, Luis Natalio, Eutimio, Ramiro, Genoveva y algunos más que me gustaría traer a este espacio.
Por allí estaban otros ilustres como Miguel Panadero, Rubí Sanz, Julio Virseda, Vicente Mompó.
Antonio Manchón, buen amigo, acudió con su hija a la cena, otro gran servidor público. Muchos años trabajando para la administración que es trabajar para los demás. Hoy le faltan dedos en sus manos para sumar amigos.
Confieso que no tomé notas y muchos nombres se quedarán en el tintero. Esta es una crónica de urgencia para que tengan aquí en El Digital de Albacete, el testimonio escrito y fotográfico de una gran noche con un protagonista de excepción, Joaquín Coy.
Pasó lo que tenia que pasar y es que Joaquín se emocionó recordando a su familia y a sus amigos y dijo que ha intentado pasar por la vida sin hacer mucho ruido y es que, querido Joaquín, el ruido no hace bien y el bien no hace ruido.
Angel Calamardo
Twitter: @AFCalamardo