/Hugo Piña/
Novena victoria y récord para el Albacete en el fútbol profesional. El número ocho había sido el límite de triunfos a domicilio por temporada y tras el de Majadahonda de ayer se llegó a nueve. Ni Floro ni Ferrando, Ramis ha sido el técnico con el que esta versión del ‘Queso Mecánico’ aspira a retornar a la élite de la mano de un equipo que lejos del Carlos Belmonte es el mejor de la categoría.
La consistencia a domicilio de este Albacete Balompié es abrumadora. El nivel ofrecido cuando los de Luis Miguel Ramis juegan lejos de casa es ejemplo de todo lo que debería contener un equipo que aspira al ascenso, mostrándose eficaz en casa y abrumador a domicilio. La victoria en Majadahonda no hace sino reflejar la gran temporada manchega en LaLiga 123, al tiempo que aumentar el casillero albacetista de puntos en su particular pelea por el ascenso directo.
Con la victoria en el Cerro del Espino y pese al penúltimo traspiés en Pamplona, el Albacete Balompié recuperó esta jornada el honorifico puesto de mejor equipo a domicilio. Con 31 puntos por los 30 del Granada (su próximo rival en el Carlos Belmonte), los de Ramis volvieron a rubricar una campaña donde cada vez que juegan lejos de casa suelen ganar.
Y precisamente de esa dinámica tan positiva que viene ofreciendo el Alba a domicilio, cabría resaltar un guarismo que evidencia lo que Ramis y sus pupilos han conseguido este curso: El Albacete conseguía ayer en Majadahonda su novena victoria en LaLiga 123, o lo que es lo mismo, desempatar con los ocho triunfos a domicilio conseguidos en las temporadas 1990/91, 1996/97, 2002/03 y 2006/07. Nuevo y merecido reconocimiento para un Alba que trabaja desde ya en la final del próximo lunes ante el Granada de Diego Martínez.
