El Albacete Balompié cae en Cádiz con un penalti de chirigota

/Nacho López/

Los blancos han mordido el polvo en la ‘Tacita de Plata’ tras una decisión errónea de Iglesias Villanueva, que transformó en penalti un piscinazo y dio con ello una puñalada mortal al conjunto de Luis Miguel Ramis. Enésimo error de los árbitros en contra del Albacete Balompié durante esta temporada.

El Albacete Balompié viajaba en pleno Carnaval a Cádiz y lo hacía con nada más y nada menos que 6 bajas después de las lesiones de Álvaro Arroyo, Eugeni Valderrama y Gorosito y las sanciones de Acuña, Gentiletti y Zozulia.

Con estos ingredientes, Luis Miguel Ramis apostó de inicio por un once titular compuesto por Tomeu Nadal en portería; Álvaro Tejero en el lateral derecho, Borja Herrera en el izquierdo y Caro y el canterano Ángel Moreno como pareja de centrales; el doble pivote fue para Dani Torres y Aleix Febas, cayendo Susaeta y Alvaro Peña a cada una de las bandas; Jeremi Bela estuvo en la media punta y Rei Manaj fue el hombre más adelantado y sobre el que recayó desde el inicio la responsabilidad del gol. En el banquillo estuvieron J.A.Caro (PS), Fran García, Muntari, Ballou, Malsa, Barri y el también canterano Miguel Ángel.

El partido comenzó con un Cádiz que impuso desde el inicio una gran intensidad y que aunque no puso en peligro a Tomeu Nadal, llevó la iniciativa del juego y anuló al Albacete Balompié, obligando a los de Ramis a buscar el ataque por el centro del campo y a no sentirse nada cómodo sobre el verde del Ramón de Carranza.

El Cádiz pudo adelantarse en dos ocasiones en menos de un minuto cuando el crono estaba a punto de llegar al 10 de juego. Primero fue un disparo de Salvi ante el que Tomeu Nadal tuvo que responder con una mano salvadora para enviar a córner, siendo tras el saque de esquina cuando Kecojevic remató con la testa y el balón salió lamiendo el palo izquierdo de la portería albacetista.

El susto pareció hacer despertar al Albacete Balompié y la entrada en juego de Susaeta, Febas y Álvaro Peña hizo moverse con más ritmo al equipo y sacudirse la presión inicial de un Cádiz que parecía haber bajado una marcha llegado el minuto 20 de partido.

A pesar de todo, el Alba se estaba sabiendo adaptar perfectamente a lo que iba demandando el encuentro y aunque sufrió en el arranque del duelo nunca demostró una falta de personalidad, defendiéndose cuando hubo de hacerlo y buscando sus opciones al más mínimo despiste del Cádiz.

El Alba se sentía cada vez más cómodo en el partido y aunque el Cádiz lo intentaba a arreones alentado por su hinchada, llegados al minuto 35 la posesión ya caía del lado blanco y Bela y Rei Manaj llevaban más peligro al marco de Alberto Cifuentes que el Cádiz al de Tomeu Nadal.

Sin embargo, a falta de seis minutos para el 45 el Cádiz hilvanó una jugada aislada que llegó a banda izquierda a pies de Jairo, centrando éste al área y encontrando rematador en un Lekic que de no haber sido por San Tomeu Nadal habría puesto a buen seguro el 1-0 ya que con su posición de remate era mucho más fácil marcar gol que errarlo o que lo parara el portero, pero San Tomeu es santo por algo.

Con el 0-0 inicial se llegó finalmente al tiempo de descanso, quedando el duelo con las espadas en todo lo alto para la segunda mitad.

El partido se reanudó sin cambios en ambos conjuntos y si el arranque de partido fue fulgurante por parte del Cádiz, el arranque de la segunda mitad fue totalmente distinto y el Alba puso pausa y posesión ante un conjunto local que ni mucho menos daba facilidades y que salía muy rápido a la contra a la mínima que tenía ocasión.

El Cádiz se empleó con dureza durante la primera mitad, cometiendo 11 faltas por 1 que cometió el Albacete Balompié, y en esta segunda mitad continuó por los mismos derroteros, rozando en ocasiones la excesiva dureza y no dudando en emplear demasiada entrega a la hora de defender; algo que por momentos debió haber sido cortado por el colegiado de la contienda.

El minuto 67 fue clave, inventándose el colegiado de la contienda, Iglesias Villanueva, un penalti que nunca existió y que debió haber sido castigado como piscinazo; aunque Tomeu Nadal estuvo muy cerca de atajar, Alex Fernández consiguió alojar en el fondo de las mallas el esférico para establecer el 1-0. Nuevamente, por enésima vez esta temporada, los árbitros vuelven a condicionar al Albacete Balompié tras una decisión, pero la de este sábado es grave y digna de poner el grito en el cielo por parte de la Directiva del Albacete Balompié ante instancias superiores.

Ramis movió el banquillo tras encajar el tanto, retirando del verde a Febas y dando entrada a Mickael Malsa, siendo un cambio de hombre por hombre que no llevó consigo ninguna variación táctica. En el minuto 77 Ballou Tabla fue el segundo cambio en las filas del Albacete Balompié, entrado en sustitución de Álvaro Peña. Bela pasó entonces a la banda y Ballou se posicionó al lado de Rei Manaj en la punta de lanza. En el minuto 85, el canterano Miguel Ángel debutó con el primer equipo al entrar en sustitución de Susaeta.

El Alba había dado en su juego un paso al frente intentado buscar el empate y el Cádiz, por su parte, yacía encerrado en su campo dando por buenísimo un marcador a favor que llegó por obra y gracia de Iglesias Villanueva en forma de regalo de Carnaval, ya que salvo él, nadie más vio penalti en una falta en la que el defensor ni si quiera toca al delantero.

El partido encaraba su recta final y el Albacete Balompié seguía sin lograr el empate, diluyéndose por tanto las opciones de acabar este sábado como líder eventual de la Liga 1|2|3, sin embargo, los pupilos de Ramis no cesaron de intentar perforar la meta contraria, pudiendo haber logrado el empate en el minuto 90 gracias a un buen remate de cabeza de Miguel Ángel que Alberto Cifuentes consiguió atajar a pesar de la dificultad que llevaba. Casi sin tiempo para más, el Alba cayó en Cádiz por culpa del mal colegiado gallego Iglesias Villanueva.