/Hugo Piña/
Cuando Néstor Susaeta Jaurriega salió del Principado de Asturias no pensó en las consecuencias que su marcha del Carlos Tartiere tendría. Quería salir a toda costa e incluso rompió un contrato que le unía -verano de 2017 por aquel entonces- a los carbayones por otra temporada más. Sin embargo, el expreso deseo del ‘guante’ Susaeta era el de buscar nuevos retos y el de hacerlo junto a su familia. Un recién ascendido a la categoría como el Alba llamó a su puerta, aceptando una nueva vida en La Mancha y enrolado como uno de los grandes pilares del proyecto que el Grupo Skyline había adquirido semanas antes.
Para entonces, su anterior Club digirió la marcha del mediocentro guipuzcoano. Aunque antes de ello situó una cláusula por la que el jugador de Éibar no podría enfrentarse al Real Oviedo en las dos próximas temporadas. Es decir, ni la 2017/18 ni tampoco la presente 2018/19. Ya el curso pasado Susaeta tuvo que ver el partido correspondiente a la primera vuelta (con victoria por 2-1) desde la grada del Belmonte, mientras que la vuelta (0-0) lo hizo desde casa. Esta campaña ocurrió lo mismo, y en la ida Néstor tuvo que repetir sistema para no romper una cláusula que se encuentra en el contrato del jugador desde su llegada al Albacete Balompié.
Y en todo este asunto se abre un espacio para la cordialidad de una cláusula que no suele ser habitual en el ámbito profesional. Menos aún cuando el jugador en cuestión no tiene ningún vínculo contractual con ese equipo al que se alude. Pero, tanto jugador como Albacete Balompié aceptaron la situación aquel verano, no previendo que meses después la realidad les daría de bruces con un equipo que necesita a Susaeta y que encima se encuentra como líder de la categoría. No en vano el duelo ante el Oviedo se presume como una verdadera final en la que los albacetistas intentarán seguir imbatidos en su feudo esta temporada.
Pero, ¿cual es ese espacio para la cordialidad? Si el Alba quiere que Susaeta juegue ante el Oviedo dentro de ese período marcado de dos temporadas, la entidad presidida por la Familia Kabchi tendría que pagar. Y un elevado precio además por la alineación del guipuzcoano frente a los del Principado. Algo, en partido liguero, inviable.
Susaeta mantendría la cláusula en caso de jugar unos play off
Entre tanto, la deducción sale sola: ¿Y si Susaeta tuviera que jugar frente al Oviedo esta temporada unos hipotéticos play off de ascenso? Bien, desde El Digital de Albacete podemos confirmar que dicha cláusula se mantendría y Susaeta no podría jugar esa hipotética (pero posible) eliminatoria de ascenso a Primera. A menos, claro está, de que el Albacete Balompié formalizase un elevado pago al Real Oviedo en concepto de jugar dos partidos (ida y vuelta) que podría definir un ascenso en el mes de junio. Llegados al caso también tienen claro en la entidad albacetista que pagarían la cláusula para que el ‘guante’ Susaeta fuese alineado por Luis Miguel Ramis.
