/Hugo Piña/
El equipo albacetista ha continuado en la mañana de este jueves con la preparación de su próximo partido liguero. Será en La Romareda y será ante un necesitado Real Zaragoza donde el líder Albacete Balompié calibre de nuevo su brillante condición en LaLiga 123.
Los de Luis Miguel Ramis regresaron como decimos este jueves a los entrenamientos en pos de perfilar una intensa matinal de trabajo en la que hubo una novedad negativa. La ausencia en el día de ayer de Álvaro Arroyo no fue en vano y el madrileño, con una rotura de grado II en el abductor, podría estar en torno a un mes alejado de los terrenos de juego.
El capitán no ha sido el único que se ha ausentado de la sesión, puesto que ni Zozulia (por precaución), Gorosito ni Eugeni Valderrama han entrenado con el grupo. De momento el que más cerca parece de regresar es el mediocentro catalán Eugeni, quien se encuentra apurando los últimos plazos para volver de nuevo al equipo. Sulleyman Muntari por su parte formalizó la primera parte del mismo con el grupo y tras ello pasó a trabajar en solitario en lo que está siendo una mini pretemporada de lo más express para el portentoso jugador ghanés.
Con todo y con ello, Luis Miguel Ramis tuvo que trabajar este jueves con una novedad en su sistema defensivo tras la ausencia del capitán: José Antonio Caro. El de Estepa será el recambio de Arroyo y tras algunos meses sin jugar volverá a tener la oportunidad de refrendar su buen inicio liguero. Junto a Gentiletti en el eje y con Fran García y Tejero en los costados, el estepeño conformará la línea defensiva en La Romareda el próximo sábado.
El equipo trabajo en lo que fue la penúltima sesión de trabajo antes de partir hacia la capital maña y lo hizo con ejercicios con y sin balón. La intensidad pero sobre todo la concentración volvieron a ser elementos fundamentales de un cuerpo técnico que se sabe el rival a batir por todos los contrincantes de Segunda, comenzando este sábado por el Zaragoza. La plantilla del Alba tiene previsto realizar este viernes su última sesión de entrenamiento (a puerta cerrada) para después partir por carretera a Zaragoza.
