/Sandra Manzanares/
Según los últimos datos de la red de control y vigilancia de la calidad del aire de Castilla-La Mancha, nuestra ciudad superaba alarmantemente las cantidades recomendadas por la Organización Mundial de la Salud. Parámetros que la dirección provincial de Agricultura, Medioambiente y Desarrollo Rural ha achacado a “fallos” en el propio equipo de medición.
De esta manera, desde la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha indican que los “datos altos” de medición de calidad del aire en Albacete relativos a las partículas en suspensión son debidos a “fallos” en la estación de control y vigilancia de la calidad del aire de la capital, que se encuentra en la periferia, en la calle de la Historia. Desde el organismo oficial conminan a “comprobar” la bajada de dichos parámetros a través de la misma página de carácter público a la que tanto ciudadanos como medios de comunicación tienen acceso.
Las gráficas que adjuntamos contienen la información restablecida, aunque los datos del domingo y del lunes, cuando parece ser, se alcanzaron los 986 microgramos por metro cúbico de las partículas en suspensión más gruesas, PM10, y los 987,8 microgramos por metro cúbico de las partículas en suspensión más finas, las denominadas PM2,5; siguen reflejados como tal.
Niveles que de ser ciertos resultarían preocupantes ya que, según la OMS, las PM10 no deben superar los 50 microgramos por metro cúbico como media de las 24 horas, ni las PM2,5 los 25 microgramos por metro cúbico como media diaria. Esta situación reabre el debate sobre porqué los organismos oficiales difunden datos, que son recogidos como fuentes fiables, antes de verificar los mismos, y en este caso, si la estación de medición funciona de manera correcta en Albacete
