El Circuito de Velocidad de Albacete volverá a ser protagonista en los juzgados, y es que el Juzgado de Instrucción Número 1 de Albacete ha llamado a declarar nuevamente al gerente del circuito, Andrés Sánchez Marín, investigado por presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y malversación de caudales púbicos, como informan los antiguos trabajadores del circuito en nota de prensa.
La declaración de Sánchez Marín está prevista para el próximo 14 de noviembre, citando igualmente a declarar en calidad de testigos a los auditores que en su día redactaron el informe de auditoria por encargo de los propios responsables del circuito, afirman los trabajadores.
Esta citación está relacionada con el informe que dicho juzgado solicitó, a petición del Ministerio Fiscal, al grupo 4º de la Policía Judicial, para que investigara las irregularidades denunciadas por parte de los trabajadores del Circuito de Velocidad, “en especial la adjudicación de contratos a empresas como ‘EIFFAGE ENERGIA’ incumpliendo los principios de publicidad y concurrencia, la cesión a ‘DORNA’ del contrato del Campeonato de Europa de Velocidad cuyos derechos había comprado el Circuito a la Federación de Motoclicismo, y que dio lugar a pérdidas de más de dos millones de euros, así como los pagos de cientos de miles de euros a un club privado ‘Club del Motor Circuito de Albacete’ sin tener un convenio o una cobertura legal definida”, indican.
“Los auditores ven indicios de prevaricación y malversación de caudales públicos en estos hechos, y a la vista de ello, la Policía ha manifestado al Juzgado que continúa con la investigación”, relatan en la nota de prensa los antiguos trabajadores, recordando que “en su día, el Juzgado acordó denegar el sobreseimiento de las actuaciones penales que se sigan contra el Gerente, Andrés Sánchez Marín, y el jefe de Administración, Antonio Eugenio Martínez, que habían solicitado ambos imputados”.
Cabe destacar que, según el comunicado enviado por los trabajadores, “a día de hoy se siguen produciendo ilegalidades en el Circuito de Velocidad, que también fueron denunciadas a los políticos responsables de la instalación, tanto a los anteriores como a los actuales, como la contratación irregular de personas físicas y jurídicas para cubrir los trabajos del personal que fue despedido”, sostienen.
“Todo ello ha llevado y lleva a que, por una pésima gestión económica y social, una instalación como el Circuito de Velocidad tenga un paupérrimo calendario de carreras deportivas, a pesar de mantener todavía cerca de un millón de euros de ingresos procedentes de los presupuestos de Ayuntamiento y Diputación de Albacete”, concluyen.
