El ocio ha sido uno de los grandes inventos de la sociedad. Una vez que el mundo pudo permitirse tener tiempo de descanso después de tener todas sus necesidades cubiertas, se dedicó a buscar múltiples formas de diversión. Pues bien, teniendo en cuenta que durante milenios este tipo de ocio siempre se realizó de forma presencial, el siglo XXI nos ha traído un nuevo modelo de diversión, el ocio online.
- Nuevas formas de divertirse
- El futuro que nos espera
- ¿Se acabó el ocio cara a cara?
Nuevas formas de divertirse
Aunque a mucha gente le pueda parecer poco social, sobre todo a gente más mayor, lo cierto es que en la actualidad el ocio ha evolucionado hacia formas mucho más individualistas y solitarias, al menos a simple vista. ¿Por qué? Porque hace algunos años, los adultos que querían divertirse debían ir al cine, al estadio a ver un partido de fútbol o al casino. Ahora ya no es necesario, ya que la misma diversión se puede tener en casa de manera mucho más cómoda desde cualquier dispositivo.
Por ejemplo, si hablamos de los casinos, actualmente se puede jugar desde un ordenador, un móvil o una tablet con solo tener acceso a internet desde cualquier sitio. Basta conectarse a través del navegador, elegir uno entre una lista de los mejores casinos online que se puede encontrar aquí, y comenzar a disfrutar. Fácil y sencillo.
¿Poco social? A primera vista puede que sí, pero en estos casinos online se puede charlar con otros jugadores a través del Chat Live en directo. Es decir, se puede hablar con más gente que en un casino presencial, aunque es cierto que no cara a cara.
El futuro que nos espera
Por ello, y haciendo un poco de adivino, se puede esperar que el futuro siga por estos cauces, aunque yendo un poco más allá. Se puede imaginar un mundo en el que estemos conectados, pero cada uno en su casa. Un mundo que a muchas personas puede resultar poco agradable pero que permitirá tener prácticamente todo al alcance de todos.
Y sí, aunque parezca mentira será mucho más social. De hecho, actualmente con las redes sociales todos estamos mucho mejor comunicados, y podemos interactuar con gente que, hace 15 o 20 años, era realmente imposible conocer. Gente con nuestros mismos gustos, con nuestra misma manera de pasar el rato, aunque estemos a miles de kilómetros. Antes el mundo se dividía por barrios o por ciudades, ahora se va a dividir por gustos.
Lo que viene es un futuro en donde cualquiera puede elegir con qué y con quién pasar el rato. Un futuro en donde haber nacido en un pueblo o en una ciudad carecerá de importancia, porque el ocio, que es lo que antes separaba estos dos mundos, será el mismo en cualquier sitio. El acceso será total se viva donde se viva.
¿Se acabó el ocio cara a cara?
Pues sí y no. No hace falta ser sociólogo para darse cuenta que, en la actualidad, aunque mucha gente se conoce a través de internet, y quizá esto se potencie en los próximos años, todavía se sigue necesitando el contacto físico. Y parece que esto no va a cambiar. Ahora mismo, aunque pertenezcas un grupo al que le gusta jugar a videojuegos, se suelen hacer ´quedadas´, la gente se sigue queriendo ver cara a cara y es muy probable que esto no cambie. Al menos de momento.
Por eso, se cree que el ocio va en la dirección en la que todo el mundo tendrá acceso a lo que quiera a través de su dispositivo (actualmente son las tablets o los móviles, pero puede ser cualquier otro en el futuro), pero en el que se querrá seguir teniendo contacto con aquellos con los que cada persona ha decidido juntarse por tener gustos similares. Y eso es un paso adelante que mejorará la vida de la gente.
Ya no será obligatorio relacionarse con la gente por proximidad geográfica, lo que impedía desarrollar un gusto personal, obligado a seguir los gustos de la mayoría de gente de su entorno, sino que habrá relaciones elegidas a través de un vinculo más fuerte que el del pasado.
El ocio, a nivel individual y colectivo, está viviendo un punto de inflexión. Al menos, las potenciales posibilidades para los usuarios serán mucho mayores. El reto está en que la humanidad lo sepa aprovechar.