Según indican a El Digital de Albacete fuentes muy cercanas a Rubén Pinar, el de Tobarra está siendo operado de una cornada con “dos trayectorias de 20 y 25 centímetros respectivamente que le ha producido un gran destrozo en los abductores. Según las primeras palabras de los médicos el pronostico es ‘Muy Grave’.
En los instantes posteriores a la cogida ya se podía apreciar la gravedad de la misma debido al gran sangrado, pero Rubén Pinar derrochó pundonor y torería y con un torniquete hecho con el corbatín, dignificó la profesión y terminó la lidia de su oponente; algo que hizo arrastrando la pierna debido a la gravedad de la cornada.