/Hugo Piña/
Llega la octava jornada en el Campeonato Nacional de Liga en Segunda División para un Albacete Balompié que tendrá que visitar al Real Oviedo (domingo, 16 horas, La Liga 123 TV).
El equipo de Luis Miguel Ramis tendrá que medirse a un contrincante que ha comenzado el curso con unas sensaciones radicalmente opuestas a las de los manchegos (no conocen la derrota) y en donde, al menos en su feudo no han conseguido todavía la victoria tras casi dos meses de competición. El encuentro estará dirigido por el trencilla vallisoletano Oliver de la Fuente Ramos (comité castellano-leonés).
Nueva oportunidad para comprobar el estado de forma de la imbatibilidad del Albacete Balompié. Será en tierras asturianas y será donde la resistencia castellana obtuvo su mayor triunfo. Será también el lugar donde la UD Las Palmas cayó derrotado (fue en Gijón) el pasado fin de semana, dejando a los manchegos como único club profesional en España que se mantiene sin derrota alguna en la competición doméstica. Todo un orgullo.
Sin embargo, del orgullo no se come y los de Luis Miguel Ramis tendrán que trabajar y hacerlo duro. El Carlos Tartiere apremia y los locales saldrán a ‘morder’ a su rival tras casi dos meses en los que no han conseguido ganar ante sus fieles. La premisa, por tanto, parece clara y el Albacete de Ramis tendrá que lidiar con un aspecto más como el emocional de su contrincante en un momento de la temporada en el que las dudas sobre Juan Antonio Anquela parecen cernirse sobremanera. Y más si no ganan a los manchegos.
Pero poco o nada deberá interesarles la situación rival a los de Ramis Monfort, quien ya se encuentra advertido de que, si sus pupilos no están al 100% durante los noventa y tantos minutos que dura un partido de fútbol, lo acabarán pagando caro. El Cádiz avisó hace unas semanas, mientras que el Zaragoza hace una semana hizo lo propio con un Alba que en la primera parte les endosó dos goles a los maños y en la reanudación vieron como estos le empataron. Y porque no hubo tiempo para más, pero el sufrimiento manchego en las segundas partes deberá ser uno de los argumentos que tanto Ramis como su cuerpo técnico tengan que recalibrar de cara a este encuentro en el Tartiere.
Y hablando de recalibrar, el técnico del Albacete tendrá que reordenar la zona media de su equipo tras la ausencia confirmada por lesión de Jon Erice. El navarro se volverá a perder la visita al feudo que un día capitaneó por una rotura de fibras, dejando al de Tarragona sin el equilibrio, veteranía y liderazgo que suele portar el pamplonica sobre el pasto. El abanico de opciones se abre para Luis Miguel Ramis con las posibles permutas de hombre por hombre o de cambio de sistema. Barri, Jean Jules y Malsa prestan atención por ello. El resto del equipo parece podría repetir en mayor o menor medida, teniendo el regreso de Tomeu Nadal como una de las consignas claras este domingo en el Principado.
El Real Oviedo por su parte llegará con muchas dudas. La derrota del pasado domingo en Alcorcón y la ausencia de triunfos en casa ha despertado una sospecha que ahora mismo se cierne sobre un Anquela que para colmo de males tendrá numerosas bajas. De hecho, el técnico jienense ha tenido que echar mano durante la semana de hasta ocho chicos del equipo filial, comprobando con ello que las bajas de cara al partido ante el Albacete serán otro de los escollos que superar si no quiere entrar en crisis cuando apenas se llevan dos meses de competición.
