/Nacho López/ Fotos: Javi Romero/
Mientras Álvaro Lorenzo terminaba de lidiar el primero de su lote, un antitaurino saltó al ruedo mostrando una pancarta en la que se podía leer: “Toreros asesinos”. Además, en su cuerpo se podía leer también: “Toros vivos libres” y “Respeto para animales”.
Rápidamente, aunque más lento de lo que debería haber ocurrido, subalternos, personal de la plaza y policía local y nacional, redujeron al ‘protestante espontáneo’ y acabó detenido por las fuerzas del orden.