/Sandra Manzanares/
La historia de Carmen y Carlos ha traspasado los límites de la provincia de Albacete, también de la región llegando a ser una de las candidatas a optar a los premios nacionales ‘Hospital Optimista’, en concreto, a la categoría que recibe el nombre de “La historia más optimista”. La de estos albaceteños no es la única realidad del ámbito sanitario de nuestra provincia, sino que, a través de Pedro Requena y Antonio Segura, se pone en valor la figura de la enfermera de Atención Primaria.
La historia de Carmen y Carlos, madre e hijo, también hizo historia en Castilla-La Mancha siendo el primer trasplante entre vivos realizado en la comunidad y que tenía lugar en el Hospital General de Albacete el pasado 18 de septiembre. “Fue a urgencias y ya iba ciego, pues solo veía un 20% de un ojo y en el otro nada”, recuerda Carmen, señalando que al mismo verlo, los médicos identificaron el color de piel de Carlos como un claro síntoma de insuficiencia renal.
Después de examinar el estado del albaceteño, fue sometido directamente a diálisis. Los riñones de Carlos corrían el riesgo de no recuperarse, y aunque tuvo que ser trasplantado, el joven ha recuperado la vida que durante unos meses le costó seguir y ahora se encuentra mejor y cada vez necesita menos medicación. Carlos se muestra optimista con el proyecto, porque “está comprobado que funciona”, como también lo hace Carmen, quien realiza su vida de manera totalmente normal, aunque está más controlada por los especialistas, pues solo tiene un riñón.
El camino de madre e hijo constituye una auténtica historia optimista, ya que de ella se desprende “el optimismo grandísimo que necesitan quienes padecen esta enfermedad”, nos cuenta Carmen, explicando que fue el Hospital General de Albacete quien presentó la candidatura, dando visibilidad a la importancia de los trasplantes y como no, destacando que de esta historia nació el primer trasplante entre vivos de la región.
También se presentan las historias de Pedro Requena y Antonio Segura, ancianos a los que la enfermera de Atención Primaria, Encarnación Reaza, cura periódicamente, en el primer caso, trasladándose al domicilio del paciente y en el segundo, en el propio Centro de Hellín, constituyendo éstas “Las historias más optimistas de la GAI de Hellín”. En los vídeos de presentación se muestra la labor de la enfermera y también de las cuidadoras de los enfermos, que son la hija de Pedro y la mujer de Antonio, y que reflejan la importancia de Encarnación en sus vidas.
Con los galardones se pretende premiar a ese equipo invencible que supera todas las adversidades en una gala que supone una “experiencia única”, ya que durante dos horas se comparten emociones, experiencias y reconocimientos entre los profesionales sanitarios más optimistas de España. Las votaciones están abiertas hasta el 15 de septiembre y se puede votar en la página web de los Premios Optimista.
NOTICIA RELACIONADA