/Marta López/
Estudiantes de tercero, cuarto y quinto del Grado de Medicina de la Facultad de Albacete, muestran un verano más su lado más solidario. Y es que gracias a los profesores de esta facultad y al apoyo de la ONG albaceteña Kipekee, un grupo de 24 estudiantes de medicina, viajará este verano a isla griega de Lesbos para desarrollar labores de voluntariado con los refugiados sirios que llegan hasta las costas europeas.
El voluntariado de estos alumnos de medicina ha comenzado ya, y según explica una de las participantes en este proyecto, Margarita Moreno, “vamos a ir rotando durante todo el verano, para ir allí por quincenas en grupos de cuatro personas”.
La labor humanitaria que pretenden realizar estos estudiantes traspasa fronteras, y en ella se están implicando prácticamente desde toda la geografía de Castilla-La Mancha.
Esta joven estudiante de cuarto de Medicina indica que una de las principales actividades que van a emprender es “hacer una campaña de recogida de gafas usadas”. Para ello cuentan con la colaboración de numerosas ópticas de Albacete, pero además, Margarita Moreno añade que “como cada uno somos de un sitio nos encargamos de avisar a más ópticas, yo como soy de Motilla del Palancar, se lo dije a las tres ópticas y también están colaborando”.
Ópticas de Tarazona y Hellín, también ayudan en la recolección de gafas usadas convertidas en material humanitario. Actualmente este grupo de estudiantes no tiene un número cerrado de ópticas que colaboran con ellos, pero según Margarita Moreno “unas 20 ópticas habrán dicho que sí” a participar en este proyecto humanitario.
Una vez en Lesbos, “revisaremos la agudeza visual a quien lo necesite, y les daremos las gafas que les puedan ir mejor”, apunta Margarita Moreno, que esta será una de las labores principales que desarrollarán estos estudiantes durante su estancia en el campo de refugiados.
Pero su labor humanitaria no termina ahí, además ayudarán a las ONG instaladas en la isla de Lesbos a hacer reparto de comidas y realizarán talleres enfocados a los niños y mujeres del campo de refugiados.
Estos estudiantes parten de la Facultad de Medicina de Albacete, con ganas de “trabajar y de ayudar en lo que se pueda”, sabiendo que “lo que nos vamos a encontrar va a ser duro, es una experiencia para la que hay que ir mentalmente preparado” destaca Margarita Moreno.
Pero sin duda alguna, pese a lo duro de la situación que viven miles de refugiados sirios en la isla griega de Lesbos, estos estudiantes están convencidos de que “será una experiencia muy enriquecedora”.
