/Sandra Manzanares/ Fotos y Vídeo: María Esperanza Panduro/
La noche en la llanura manchega, la explosión de colores que nace de la naturaleza, la tranquilidad que se respira en un puerto pesquero o un felino muy especial coronan la exposición de la artista albaceteña, Mónica Márquez, que a través de la pintura plasma sus sentimientos y emociones como si de poesía se tratase. El trabajo de esta artista de 26 años tiene un valor añadido, pues una enfermedad rara debilita sus huesos, por lo que todas sus obras están hechas con la boca.
“Empecé con algo tan básico como una pajita y agua”, nos cuenta Mónica, quien divertida, recuerda como siendo apenas una niña vertía agua en una servilleta e imaginaba pájaros y casas. En uno de los periodos en los que la joven estuvo ingresada en el Hospital General de Albacete, y viendo la inquietud artística que le era innata, los voluntarios del centro sanitario le proporcionaron témperas, acuarelas y pinceles, comenzando así una andadura de más de una década en el mundo de la pintura.
Arte que se muestra en la exposición “Pintura con la Boca, pintura sin barreras: Constancia y Perseverancia”, que acoge Casa Persona y en la que se pueden apreciar más de una treintena de lienzos, que son fruto del trabajo y de la fuerza de voluntad de Mónica. ‘Cerezos en Flor’ es el cuadro favorito de la artista y ‘La Habitación de Mónica’, uno de los que más tiempo le ha llevado realizar. ‘Oro en la playa’, ‘Arco Iris en la Mancha’, ‘Fuga Floral’ o ‘Trazos y musicalidad’ son algunas de las obras que componen la muestra y que se encuentran a la venta.
Flores, paisajes, vivencias y recuerdos en tonos alegres muestran la visión optimista que Mónica tiene de la vida. “He aprendido mucho de ella”, nos confiesa su profesora de pintura, Inmaculada Escribano, señalando que la joven albaceteña “siempre tiene una sonrisa”, que sin duda, se traduce en su obra. “No repetimos ni copiamos cuadros”, puntualiza Inmaculada, destacando que muchas de las obras se corresponden con fotografías que son ampliadas y plasmadas por Mónica en el lienzo.
La artista albaceteña, que forma parte de la ‘Asociación de Pintores con la Boca y el Pie’, y que además es psicóloga y miembro del Colegio de Psicología de Castilla-La Mancha, no se olvida de sus raíces, como así lo demuestran los lienzos que representan rincones emblemáticos de nuestra ciudad como la Plaza del Altozano, La Puerta de Hierros o el Parque Abelardo Sánchez.
Más de una década de experiencia en el mundo del arte y varios premios en su haber han llevado a Mónica a mostrar su obra en diversos puntos de la geografía española; pero por encima del universo poético de esta pintora se desprende un claro mensaje de superación y fuerza volcado en una exposición que rompe barreras y que los albaceteños podrán disfrutar hasta el 14 de junio en Casa Perona.