FOTOS | La Procesión en honor a la Virgen de Belén puso el broche de oro a las Fiestas Mayores de Almansa 2018

/Belén Belotto/Fotos: María Guerrero/

Las Fiestas Mayores de Almansa ya son historia. Tras un intenso día grande en honor a su Patrona, la Virgen de Belén, la procesión y la posterior traca de color fueron el colofón a la edición 2018. 

Fue una jornada intensa de actos y emociones que comenzó muy temprano con la diana cristiana de arcabucería organizada por la Agrupación de Comparsas que anunciaba el día de la Virgen. A las 11 de la mañana se celebró una solemne eucaristía con la participación de la Sociedad Unión Musical y a continuación, en el jardín de la Casa Grande, tuvo lugar el acto de Homenaje al Almanseño Ausente en el que autoridades políticas y festeras recibieron a los almanseños ausentes que visitaron la ciudad del 1 al 6 de mayo. 

Ya por la tarde fue el turno de la Batalla de flores, que llenó de color y alegría las calles, y de uno de los actos más solemnes de todo el programa: la Procesión Mayor en honor a la Virgen de Belén, un desfile de fe en el que participaron todos los festeros de la Agrupación de Comparsas y la Junta Festera de Calles. Acompañando a la patrona también procesionaron las imágenes de San Juan, San Isidro, San Roque y el co-patrón de la ciudad, San Francisco de Asís. 

En la procesión participaron, como suele ser habitual, dos colectivos independientes pero paralelos que plasman el fervor y el respeto por la Virgen de Belén: la Sociedad de la Virgen y la Sociedad de Pastores. Ellos precedieron a la imagen de la patrona, custodiada por la corporación municipal. 

Este acto tuvo salida y llegada en la Plaza Santa María. Por ello, y debido al elevado número de participantes, se desarrolla en un trazado diferente y con más longitud que el resto de desfiles de las fiestas almanseñas. El itinerario fue: calle Aragón, Pascual María Cuenca, calle Del Campo, Calvario, Aniceto Coloma y Virgen de Belén hasta la iglesia de la Asunción. 

Los almanseños recibieron a su patrona entre vítores, aplausos e incluso con pétalos de rosas desde muchos balcones. Sobre las 22,30 horas llegó de nuevo a la Plaza Santa María. Allí se disparó una traca de color que sustituyó al tradicional castillo de fuegos artificiales con la intención de facilitar el acceso de la Virgen a la Iglesia de la Asunción, donde la esperaban cientos de fieles. Entre lágrimas y mucha emoción llegó el final de las Fiestas 2018. 

La Virgen de Belén permanecerá en la iglesia hasta el domingo 13 de mayo, cuando se celebrará su romería para acompañarla hasta el Santuario de Belén. 

El Digital de Albacete

Diario digital líder en Albacete con toda la información de la capital y provincia
Botón volver arriba