- Jorge Buergo llegó de la mano de Skyline al Albacete Balompié a principio de temporada para ser el nuevo Director General del club blanco y a base de un trabajo sordo, como si de un mediocentro defensivo se tratase, Buergo ha dado la estabilidad a los quehaceres en los despachos de la Ciudad Deportiva Andrés Iniesta; algo que no ocurría cuando Santiago Pozas y algún que otro ex consejero eran los encargados de las parcelas que a día de hoy dirige con sapiencia y buen hacer el asturiano.
- En El Digital de Albacete hemos hablado largo y tendido con el ovetense y en el siguiente reportaje lo conocemos un poco más tanto personal como profesionalmente.
Jorge Buergo (Oviedo, 1966) se ha dedicado prácticamente toda su vida profesional a trabajar en el sector financiero, pero a su vez siempre estuvo ligado al fútbol y mantuvo una relación muy estrecha con el mundo del balón. Fue durante muchos años árbitro y además, fue Secretario General de la Federación Asturiana de Fútbol y durante 12 años se encargó de la Vicepresidencia de dicha Federación como directivo, algo que indirectamente le llevó a tener responsabilidades en la Real Federación Española de Fútbol. Sí que es cierto que su primera experiencia ligado a un club, es la que está desarrollando actualmente en el Albacete Balompié.
La movilidad geográfica nunca ha sido un problema para Jorge Buergo y por eso se pensó muy poco el hecho de dar su sí a Skyline cuando Víctor Varela le propuso ser el Director General del Albacete Balompié y abandonar su Asturias natal. Solo tuvo una inquietud, saber a ciencia cierta que el proyecto de la Familia Kabchi en el Alba sería a medio-largo plazo y no algo efímero.
A pesar de lo que pudiera parecer, Jorge Buergo nunca había tenido ningún vínculo con Skyline antes de embarcarse en el Albacete Balompié, pero Víctor Varela tuvo muy claro que el asturiano era el hombre que necesitaban para enderezar el rumbo de unos despachos que habían visto como el anterior Director General del club pasaba más tiempo en Sevilla que en Albacete. Por eso, una condición ‘sine qua non’ es que Buergo fijase su residencia en nuestra capital y se entregase en cuerpo y alma al escudo del murciélago.
Desde la llegada de Skyline al Albacete Balompié ha habido una profunda reestructuración en todos los estamentos del club y mientras Nico Rodríguez es el máximo responsable de la parcela deportiva, Víctor Varela y Buergo son los encargados de dirigir la parcela de gestión, recayendo en el primero las relaciones institucionales y siendo Jorge Buergo el encargado de hacer funcionar al Alba como una empresa pura y dura con las particularidades que tiene, obviamente, que tu empresa esté entre los 42 mejores equipos de España y se llame Albacete Balompié.
Procedimentar la forma de trabajar en el club era fundamental para adecuarse a lo que a día de hoy requiere el fútbol profesional y ese fue uno de los primeros pasos que dio Jorge Buergo nada más llegar al Albacete Balompié. Algo tan sencillo, y tan difícil, como que cada empleado sepa qué tiene que hacer y a quién debe dirigirse según sean sus necesidades o requerimientos. A día de hoy, el Alba es una ‘empresa’ segmentada en la que cada uno de los 18 empleados que tiene el club blanco en los despachos, se intenta que sea una pieza con un funcionamiento individual perfecto dentro de un engranaje perfecto. Así debe ser y así quiere que sea Jorge Buergo, un ‘jefe’ de los que exige al máximo pero al mismo tiempo sabe reconocer en todo momento el buen hacer de los que están bajo su cargo. La mejor manera de que todo el mundo se sienta importante dentro de unos despachos que necesitan que sea así para el correcto funcionamiento del conjunto.
Acostumbrados a verlo día a día por la Ciudad Deportiva Andrés Iniesta ataviado de americana y corbata, no le dolieron prendas a Jorge Buergo el día que el Córdoba visitó el Carlos Belmonte en bajarse al césped para hacer las funciones de Delegado tras los problemas de salud que arrastraba por entonces Rodrigo Sánchez tras recibir un balonazo en un ojo en el partido de pretemporada ante el Getafe. Lo primero es el Alba y así trabaja Jorge Buergo día a día. 24 horas al día ‘con la mente en blanco’, y no precisamente de no usarla.
Habiendo pasado únicamente nueve meses desde su llegada al Albacete Balompié, obviamente quedan muchas páginas de historia por escribir con Jorge Buergo al frente de la Dirección General del club, pero el asturiano es cauto y prudente y se marca objetivos a muy corto plazo. Estabilizar y consolidar al Alba en el fútbol profesional es su cometido y en ello se vacía, ya que la deuda que ha estado ligada al club blanco durante muchos años atrás ha sido el verdadero yugo de un equipo que ha estado más de una vez al borde del precipicio. Y no solo del precipicio deportivo, sino del económico, que guste o no, es el principal. Sin dinero, no hay fútbol. Triste pero real.
Hablábamos antes de las particularidades que tiene una empresa cuando es un club de fútbol, pero la más peculiar es que todo depende de una esfera llamada balón que cuando entra va todo muy bien y cuando no, tira por tierra mucho del buen hacer en otros estamentos del club que no son el deportivo. Afortunadamente, a día de hoy, y toquemos madera porque no sabemos cuánto caprichosa puede llegar a ser la pelotita, tanto en los despachos desde la llegada de Jorge Buergo de la mano de Skyline como en el césped desde que Enrique Martín llegó al banquillo, todo se está haciendo con una nota alta. Que así siga.
