Un hombre, de un grupo de cinco personas, ha sido condenado a 2 años de prisión por un delito de lesiones y a no comunicarse mediante cualquier medio ni aproximarse a la persona agredida a una distancia inferior a 100 metros durante 4 años, así como a indemnizarle en 258.174 euros según ha dictaminado la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete.
Por contra, los otros cuatro hombres acusados en esta causa han sido absueltos del delito de lesiones, pero la misma Sala condena a tres de ellos a indemnizar a la víctima en 1.500 euros cada uno.
Detalla la sentencia de la Audiencia Provincial de Albacete en sus hechos probados que el 1 de mayo de 2010, sobre las 6:15 horas, cuatro de los cinco acusados, “amigos entre sí”, estaban celebrando las fiestas locales de Almansa cuando vieron a un hombre y otro amigo de éste con el que había tenido una discusión uno de los acusados “minutos antes cuando salían de un pub, gritándoles y corriendo detrás de ellos a fin de agredirles, escabulléndose uno de los dos”, y a cuya carrera se unió un quinto acusado, “sin relación amistosa con ninguno de los anteriores, quien portaba en mano una navaja abierta de unos 10 centímetros de larga y 3 de ancha”.
Sigue relatando la sentencia de la Sala que el quinto acusado y condenado en esta causa “alcanzó a la persona” que todos perseguían “clavándole la navaja en la cara posterior cuadrante superior externo de la pierna derecha que lo hizo caer entre dos vehículos”, llegando el resto de perseguidores, “golpeándole repetidamente puñetazos y patadas al menos tres de los acusados hasta que fueron apartados y separados por otra persona”.
La víctima precisó tratamiento médico, quirúrgico, incluso psiquiátrico y rehabilitación, dicta la sentencia restableciéndose un año después durante los que estuvo impedido para sus ocupaciones habituales, dos de ellos hospitalarios, quedándole como secuelas “tratamiento adaptativo mixto crónico, sección, parálisis, paresia y neuralgia del nervio ciático que le supone un déficit en dicho miembro de un 48% de sus funciones normales”, y perjuicio estético, además de incapacidad de dedicarse a sus ocupaciones habituales.
