/Llanos Esmeralda García/ Fotos y vídeo: María Esperanza Panduro/
Esta semana se ha celebrado la Semana Mundial del Glaucoma, una enfermedad ocular degenerativa y que en la actualidad no tiene cura. Se estima que en la provincia de Albacete afecta a unas 8.500 personas.
“El glaucoma es una enfermedad traicionera porque no tiene síntomas. Existen dos tipos, uno en el que hay un pequeño grupo de pacientes, glaucoma agudo, a los que les duele los ojos, se les pone rojos, tienen una tensión ocular muy alta y hay que tratar de inmediato; y por otro lado está el glaucoma crónico”, es la forma más frecuente de esta enfermedad, que “no da ningún síntoma de alarma”, señala Nieves Puerto, oftalmóloga en el Hospital Universitario Ntra. Sra. del Perpetuo Socorro de Albacete.
“El glaucoma es una enfermedad del nervio óptico que no tratado hace que el mismo vaya perdiendo toda su reserva de las fibras nerviosas que dan la luz al ojo, esa luz se va apagando progresivamente hasta dejarlo completamente ciego”, detalla Puerto “un ojo que se queda ciego por glaucoma es un ojo ciego para toda la vida”.
Charo
Ejemplo de paciente es Charo Vela quien lleva en la consulta de oftalmología de dicho hospital más de cinco años debido a un glaucoma de ángulo abierto. Charo señala a El Digital de Albacete que gracias a una revisión “al tomarme la tensión de los ojos descubrimos que estaba alterada”. Después de ese momento Charo comenzó a controlarse la tensión “con gotas, láser y finalmente se me intervino varias veces del ojo izquierdo, desde entonces va a hacer dos años y el ojo se mantiene muy bien de tensión y no lleva medicación”.
El glaucoma es una enfermedad crónica y aunque afecta a ambos ojos pueden no estar alterados por igual, por eso señala Charo que su ojo derecho “lo estamos controlando con medicación”. Una lucha con esta enfermedad de la que asegura “la llevo con mucha fe, con mucha esperanza y mucha confianza en la doctora Puerto” de quien resalta “ha buscado siempre la mejor solución”.
El glaucoma es asintomático y evoluciona lentamente, por lo que en muchos casos no se detecta hasta llegar a un estado avanzado. Algo tan sencillo como acudir al oftalmólogo, es quien trata y diagnostica el glaucoma, y tener un diagnóstico temprano puede frenar la progresión del glaucoma. Y es que a partir de los 40 años todos somos sospechosos de sufrir glaucoma, de ahí la importancia de las revisiones y más si la persona cuenta con antecedentes familiares. “Es muy importante diagnosticarles a tiempo para tratar el glaucoma de forma precoz”, señala Puerto “a los 40 años la incidencia del glaucoma podríamos estimarla en 1-1,5%, a partir de los 65 años ya estamos en 2%, esa incidencia sube con los años”.
“He tenido la suerte de que se ha controlado desde el primer momento y no llegué a perder nada de visión”, relata Charo. También advierten los expertos a los pacientes de glaucoma de la constancia con el tratamiento ya que el daño ocasionado por el glaucoma no es reversible.
Consultas
En las consultas monográficas de oftalmología entran todos los días “tres personas con sospecha de tener glaucoma o con un glaucoma diagnosticado que no se está controlando”, señala la oftalmóloga, es más a estas consultas hay que sumarle las que “vemos de oftalmología general y ahí hay también personas con hipertensión ocular, con glaucoma leve que están controlados con una gota”. Informa la especialista que “todos los días en las monográficas del glaucoma vemos entre 25-30 pacientes con glaucoma si no diagnosticado con alta sospecha” enfermedades que si bien no consiguen frenar del todo consiguen enlentecer mucho la progresión para que el paciente pueda tener una buena calidad de vida.
El glaucoma es un daño que se produce en el nervio óptico y las técnicas diagnósticas irán encaminadas a ponerlo de manifiesto. Desde la consulta de oftalmología albaceteña cuentan con una serie de pruebas estructurales que ponen de manifiesto la lesión en los ojos, como: la tonometría, la Tomografía de Coherencia Óptica (OCT) o pruebas funcionales que ponen de manifiesto la afectación visual del paciente a través del campo visual.
En cuanto al tratamiento de esta patología la doctora Puerto precisa que puede realizarse a través de “medicación, láseres y cirugía”. El problema de esta patología es que no existe ningún tratamiento curativo, pero sí medidas muy efectivas para evitar que la enfermedad progrese “no hay cura para el glaucoma”, señala Puerto “el glaucoma es una enfermedad que se basa en el tratamiento crónico. En un primer peldaño tenemos las gotas, en algunos pacientes podemos usar técnicas de láser y si con el láser no se controlan pasamos a la cirugía en quirófano. Tenemos una nueva técnica láser aquí en Albacete, todo gracias a la iniciativa de un compañero al doctor Antonio Moreno, que desde hace unos meses se tratan algunos casos de glaucoma con una cirugía mínimamente invasiva con un láser excímer, la finalidad de esa técnica es bajar la tensión, como el resto”.
En la actualidad el glaucoma es la segunda causa más habitual de ceguera evitable siendo el gran desconocido de las patologías oculares.
