/Hugo Piña/Nacho López/
Nadie podrá dudar de la profesionalidad de un técnico como José Manuel Aira que consiguió el ascenso a la primera con el Albacete Balompié. Es innegable el trabajo de un entrenador que obtuvo el premio del ascenso gracias a su labor y a la de una plantilla que certificó, doce meses después del descenso, el ‘hito’ de regresar al fútbol profesional con un Albacete que a decir verdad se trabajó y mucho el objetivo final marcado por el club a comienzo de curso.
Sin embargo, todo en la vida se va desgastando y la posición de Aira Lindoso en Albacete no fue menos, y su continuidad en La Mancha, tras el ascenso, no fue la acertada. Argumentaciones, opiniones o teorías no pueden desenmascarar la puesta en escena de un entrenador que fracasó con el Alba en Segunda, pudiendo advertirlo con unos números que sí conciben el craso error de la propiedad al constatar su continuidad como técnico.
Haciendo una breve comparativa del equipo en la Liga 1|2|3 podemos ver que tanto José Manuel Aira Lindoso como Enrique Martín Monreal Lizarraga al frente del Alba en las siete primeras jornadas tuvieron una ‘realidad aparente’ fraguada en unos números dicotómicos. Es decir, advertimos sin rodeos que el Alba de Aira en las primeras siete jornadas obtuvo cuatro puntos tras cinco derrotas (Córdoba, Alcorcón, Lugo, Tarragona y Soria), una victoria (Oviedo) y un empate (Granada) mientras que Martín ha obtenido -en el mismo número jornadas y frente a los mismos rivales- un total de once puntos tras las tres victorias (Granada, Alcorcón y Numancia), dos empates (ante Lugo y Oviedo) y dos derrotas (Córdoba y Nàstic) que, de paso, han desenmascarado la valía en el fútbol profesional de unos y otros al frente de un Albacete Balompié que por suerte parece haber olvidado ya los primeros compases de una competición en donde encajó escandalosas goleadas.
La quimera del Alba ahora mismo es que de haber sumado en los primeros siete partidos los números que ha obtenido Martín Monreal en su inicio de segunda vuelta, siete puntos más a la sazón con la ‘bruja’, el cuadro albacetista dispondría en la actualidad, haciendo un paralelismo, de cuarenta y tres puntos en la clasificación como actualmente poseen Osasuna y Sporting de Gijón. A uno del play off de ascenso a Primera División y a catorce del descenso que marca la Cultural y Deportiva Leonesa.
Los números son los números y en base a ellos, lo que es incuestionable, es que gracias a la destitución de José Manuel Aira el Alba recobró la vida, pudiendo respirar aliviado en una competición en la que puede pelear de tú a tú con cualquiera gracias a Georges Kabchi y su junta directiva que, de una vez por todas, se decidieron a destituir a José Manuel Aira después de que su equipo hiciera el ridículo en Soria y de arrastrarse por los campos de España mientras el de Ponferrada comandaba la nave blanca desde el banquillo.
