Un joven ha sido condenado por la Audiencia Provincial de Albacete como autor de un delito intentado de asesinato, con la agravante de parentesco y las atenuantes de arrebato y analógica de alteración psíquica, a 2 años de prisión así como la prohibición de aproximarse a su padre en un radio inferior a 300 metros, a su domicilio, lugar de trabajo o cualquier lugar donde se encuentre durante 3 años.
La sentencia de la Sección Segunda de la Audiencia albaceteña ha estimado además que se imponga al procesado una medida de libertad vigilada durante 5 años, que comprenda la obligación por parte de éste durante ese tiempo de participar en programas de deshabituación en el uso de videojuegos y sumisión a tratamiento médico para eliminar la adicción a este tipo de conductas.
Hechos probados
La sentencia de la Sala, a la que ha tenido acceso El Digital de Albacete, detalla en sus hechos probados que sobre las 18:10 horas del 16 de agosto de 2016 un hombre se encontraba en su domicilio en Albacete, en compañía de su esposa y su hijo de 22 años en el momento de los hechos -procesado en este procedimiento-.
Sigue relatando la sentencia que el padre insistía a su hijo para que “se pusiera a estudiar” de cara a los exámenes que tenía que hacer en septiembre para el módulo de jardinería que estaba estudiando, por lo que se dirigió a la habitación del hijo, encontrando a éste “merendando y jugando con el ordenador”. En dicho momento, dicta la sentencia, el padre requirió al hijo que se pusiera a estudiar y, al decirle el procesado que “le dejara acabar la partida”, el padre le contestó “deja de tomarme el pelo, si no quieres estudiar vale, pero el ordenador no lo vas a tocar”, acto seguido se agachó para coger el cable del dispositivo y tirar de él cuando el procesado “cogió el cuchillo con el que había estado merendando, con una longitud de unos 18,5 cm, y propinó con el mismo un fuerte golpe a su padre en el costado”.
Tras el incidente, la hija fue quien avisó a los servicios de emergencia para que atendieron a su padre siendo trasladado al Hospital General donde tuvo que ser intervenido. Como consecuencia de estos hechos, resultó con herida en hipocondrio derecho.
El procesado, esgrime la sentencia, “había mantenido varias discusiones con su padre debido a que éste le recriminó de manera reiterada el uso desmedido del ordenador”, además presenta “una fuerte adicción que sufre al uso de los videojuegos”.
