Un producto de Previsión, destinado a la constitución de una base de ahorro de cara a la Jubilación debe adaptarse a nosotros y nunca, nosotros a él.
Como clientes, asegurados o partícipes, nuestra situación económica a lo largo de nuestra vida, van cambiando, evolucionando, por lo que aportar a un producto que no nos permita variar de manera adaptada a cada momento, no es lo más aconsejable.
Además, en base a las últimas reformas realizadas, los Planes de Pensiones han perdido la rigidez inicial que tenían, permitiendo ya la disposición de los derechos consolidados a partir de la 10ª anualidad, sin límite alguno, ni contingencia acaecida y ampliando la casuística de causas de rescate anticipado.
Los Planes de Pensiones de Globalcaja, son completamente flexibles, tanto en el importe de las aportaciones, como en la frecuencia establecida para las mismas, permitiendo de este modo incrementar o disminuir el importe de estas, mantener o congelar la frecuencia, traspasar de un plan con una política inversora a otro más conservador, o por qué no, más arriesgado si la situación de los mercados y mi evolución como partícipe me lo permite.
También es importante conocer que los Planes de Pensiones permiten el cobro de los derechos consolidados bien en forma de renta, como en forma de capital o de modo mixto, de manera que el impacto fiscal se diluya lo más posible en el momento de percibir la prestación.
A final de cuentas, si nosotros cambiamos, lo normal es que nuestro Plan de Pensiones cambie con nosotros.
Para ello contamos con el asesoramiento de Globalcaja a través de su RED de Oficinas y Profesionales.
