TOROS | Perera y Ginés Marín, a hombros

/Nacho López/ Foto: Javi Romero/

Séptima corrida de la Feria de Albacete, con una terna totalmente extremeña compuesta por Antonio Ferrera, Miguel Ángel Perera y Ginés Marín, que se presentaba en la Plaza de toros de nuestra capital como matador de alternativa.

Los toros pertenecen a la ganadería de D. Santiago Domecq, unos pesos conprendidos entre los 560 kilos del cuarto y los 487 del sexto.

PRIMER TORO

Con tres cuartos de plaza y vestido de grana y oro, Antonio Ferrera abrió plaza para dar lidia a ‘Alabardero’, de 505 kilos de peso, herrado con el número 76 en los costillares, de capa negra meana y nacido en marzo de 2013.

Brindó Ferrera al público el incómodo astado de Domecq, reservón, con la cara demasiado abajo y entre los cuartos delanteros, rebrincado, deslucido y con otros tantos aspectos negativos, nunca dio opciones de triunfo a un Ferrera que le supo dar muy bien la lidia que necesitaba y que se mostró firme, sólido y muy profesional sacándole al toro lo poquito bueno que tenía.

SEGUNDO TORO

‘Ostrero’ fue el hipotético segundo de la tarde, un toro muy en el tipo de Santiago Domecq, con 507 kilos de peso, herrado con el número 52, nacido en enero de 2013 y de capa negra.

Mermado físicamente desde su salida por el portón de chiqueros y acentuada esa invalidez conforme avanzó el tercio de varas, ‘Ostrero’ fue devuelto a los corrales.

SEGUNDO BIS

Corrió Perera turno y en vez de lidiar al sobrero lidió al que tendría que haber salido en quinto lugar, un toro de grandísimas condiciones que fue premiado con la vuelta al ruedo tras el arrastre y al que Perera le realizó una sensacional faena y despachó de una certera estocada casi en todo lo alto.

El público de la Plaza de Toros de Albacete supo reconocer la gran faena de Miguel Ángel Perera y pidió con fuerza las dos orejas para el de La Puebla de Prior, que fueron paseadas por el de grana y oro tras conceder la presidencia los dos trofeos.

‘Merecido’, que así se llamaba el astado, pesó 523 kilos, iba herrado con el número 74, nació en marzo de 2013 y era de capa negra meana.

TERCER TORO

‘Remendito’ fue el tercero de la tarde, primero del lote de Gines Marín, quien ataviado de burdeos y oro dio lidia a este astado de 495 kilos de peso, de capa negra bragada, herrado con el número 64 en los costados y nacido en febrero de 2013.

Ginés Marín comenzó la faena dubitativo y costó al joven diestro meter al toro en faena, pero una vez dado horma al de Santiago Domecq, Marín puso calma y llegaron los mejores momentos de una faena que acabó conectado con los tendidos.

Mejor por el pitón derecho que por el izquierdo, el astado permitió a Ginés Marín dominar los terrenos y el diestro fue creciendo al tiempo que desarrollaba una faena que fue de menos a más y que terminó suponiendo una oreja para el matador después de despachar al astado con una estocada y un descabello.

CUARTO TORO

Se reanudó la corrida tras el intermedio con la salida al albero de ‘Fantasmón’, de 560 kilos de peso, nacido en enero de 2013, herrado con el número 50 en los costados y negro mulato de capa.

En esta ocasión sí y llegado el tercio de banderillas, Ferrera agarró los palitroques y dejó tres pares en todo lo alto, recibiendo el aplauso de la mayoría del respetable y algunos pitos por parte de aficionados que le recriminaban que no lo hubiese hecho también en el primero de su lote lo de banderillear.

Comenzada la faena de muleta y ante la falta de condiciones del astado tuvo que poner todo un Antonio Ferrera que se pegó un arrimón de los de órdago y que resultó prendido poco antes de entrar a matar. Herido por asta de toro en la parte posterior del muslo izquierdo, Ferrera no quiso ni ir a la enfermedad estando el toro en el ruedo ni que le hicieran un torniquete a pesar de la gran cantidad de sangre que estaba perdiendo sobre el albero.

Muy mermado tras la cogida, Ferrera erró lamentablemente con los aceros y no pudo pasear un trofeo que se había ganado a base de raza, pundonor y profesionalidad a raudales.

QUINTO TORO

Salió en quinto lugar el sobrero, también de la ganadería de D. Santiago Domecq, de nombre ‘Verdugo’, herrado con el 35 en los costillares, nacido en diciembre de 2012, negro meano de capa y con 511 kilos de peso.

No consideró oportuno brindar el astado Miguel Ángel Perera y comenzó su faena de muleta delante del tendido 10, templando, mandando y ahormando a un astado que tenía un peligro sordo ya que parecía menos alimaña de lo que realmente era.

Dominó Perera los terrenos y sacó las embestidas que tuvo el de Domecq, a pesar de que al toro le costaba tomar los engaños y repetir.

Estuvo Perera muy por encima del astado, al que despachó de una certera estocada que hizo rodar al toro sin puntilla. No hubo petición y por tanto, tampoco trofeo.

SEXTO TORO

Cerró plaza Ginés Marín dando lidia a ‘Ralea’, de 487 kilos de peso, negro bragado de capa, herrado con el 83 en los costillares y nacido en diciembre de 2012.

Comenzó Marín muy seguro la faena de muleta y pronto conectó con unos tendidos que supieron entender el buen hacer del joven torero.

Cuando Ginés Marín se echó la muleta a la izquierda y al natural llegaron los mejores lances con la franela, dejando auténticos carteles de toros en algunos muletazos con la zurda.

Con poquita transmisión, Ginés Marín exprimió al de Santiago Domecq y le sacó los muletazos casi con sacacorchos, ya que el astado nunca ayudó debido a sus escasas condiciones.

Con la profesionalidad por bandera y con valor a raudales, Marín se vació para intentar acompañar a Perera por la puerta grande con un toro difícil como pocos y malo de solemnidad. Despachó al morlaco a la primera y cortó una oreja de mucho peso.

Oreja que le sirvió finalmente para salir por la Puerta Grande de la Plaza de Toros de Albacete en la primera de las dos tardes que tiene contratadas en el abono de nuestra ciudad.

FOTOS | Las mejores imágenes de la tarde de triunfo de Perera y Ginés Marín en Albacete

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