El Juzgado de lo Penal número 1 Bis de Albacete tiene previsto juzgar mañana martes 11 de abril a un acusado de un presunto delito de abuso sexual por el que la Fiscalía le pide 30 meses de cárcel y que no se acerque o comunique con la víctima durante cuatro años.
El escrito de acusación del Ministerio Fiscal detalla que los hechos ocurrieron en la madrugada del 7 de junio de 2013, en Albacete. La víctima subió a un taxi, conducido por el acusado, en una céntrica plaza de la capital. Lo hizo a las 3.45 horas y ayudada por sus amigas, por el gran estado de embriaguez en el que se encontraba. Sin embargo, la joven llegó a su domicilio, en una calle a las afueras de la ciudad, a las 7.00 horas. Según el escrito de acusación, durante ese intervalo de tiempo, en el que la joven permaneció dentro del taxi, el acusado, aprovechando el estado de semiinconsciencia en el que se encontraba la víctima, y sin su consentimiento, le realizó tocamientos en la zona púbica y la besó.
Tras el conocimiento de los hechos el revuelo entre la sociedad albaceteña fue elevado ante la posibilidad de que el acusado pudiera seguir trabajando en la actualidad como taxista, hecho que fueron desmentidos desde la Asociación Provincial de Auto – Taxi de Albacete al manifestar a este diario que el acusado fue despedido de inmediato una vez conocidos los hechos ya que era asalariado de un empresario del sector propietario de la licencia.