Esta mañana las cooperativas vitivinícolas Virgen de la Nieves de Cenizate y San Antonio Abad de Fuentealbilla, han suscrito un ambicioso proyecto de fusión comercial que han rubricado sus respectivos presidentes en presencia del presidente de la Diputación, Santiago Cabañero, del delegado provincial de Agricultura, Manuel Miranda, del director general de Industrias Agroalimentarias, Agapito Portillo y de los alcaldes de ambos municipios, Enrique Carrión y Angel Salmerón, respectivamente.
La firma del acuerdo ha tenido lugar en las instalaciones de la cooperativa San Antonio Abad de Fuentealbilla en presencia de socios y juntas rectoras de ambas cooperativas, además de representantes de ASAJA, UPA y de representantes de entidades financieras.
Ambos presidentes han coincidido en que este es un primer paso que tiene como principales objetivos reducir costes, aumentar la dimensión de ambas cooperativas e incrementar la capacidad de penetración en los mercados, mientras que los alcaldes, han felicitado a las respectivas juntas directivas por esta iniciativa en un sector productor que es el motor económico de ambos municipios.
En este sentido Enrique Navarro, alcalde de Cenizate, subrayó que “en una economía globalizada la unión hace la fuerza y que desde el ayuntamiento estamos dispuestos apoyar al sector y a servir de interlocutores ante otras administraciones en la búsqueda de apoyo. Del mismo modo Angel Salmerón, alcalde de Fuentealbilla, expresó su deseo de que esta fusión sea un ejemplo para todo el sector en toda Castilla-La Mancha y que cundan más iniciativas en este mismo sentido.
El presidente de la Diputación, Santiago Cabañero, destacó la importancia del acuerdo adoptado entre las dos cooperativas porque “aunque ya hemos demostrado que sabemos producir en calidad, nos falta todavía lograr esa dimensión óptima que nos permita competir en el mercado y que solo se alcanza con alianzas estratégicas, uniendo esfuerzos y creando sinergias”.
Así mismo subrayó que tanto Cenizate como Fuentealbilla “son dos pueblos de La Manchuela que dependen básicamente del sector del vino, siendo sus cooperativas su motor económico, por lo que el futuro de ambos municipios y su población dependerán en gran medida de lo que entre todos seamos capaces de hacer”.
Por otra parte Cabañero auguró un gran éxito para este proyecto porque “conozco a los dos presidentes de la cooperativa, a los dos alcaldes y sé que se van a volcar al igual que han hecho los técnicos para que este proyecto salga adelante. Desde la Diputación –añadió- vamos a seguir apoyando al sector del vino, a las denominaciones de origen y al desarrollo rural para intentar fijar la población en nuestros pueblos porque si no éstos no tendrán futuro”.
Manuel Miranda, como director provincial de Agricultura, agradeció la generosidad y la muestra de solidaridad de ambas cooperativas, “porque siempre que hay acuerdos es porque todo el mundo cede y por el compromiso asumido con este proyecto por parte de ambas cooperativas. Miranda subrayó que esta es la única alternativa de futuro: ganar en dimensión empresarial que es una de las líneas estratégicas que ha fijado el Gobierno de Castilla-La Mancha para el sector agropecuario.
Por su parte el director general de Industrias Agroalimentarias, Agapito Portillo, reiteró las felicitaciones de todas las instituciones a las dos cooperativas, afirmando que nos encontramos ante una buena noticia porque en Castilla-La Mancha estamos haciendo bandera de la integración cooperativista.
El director general recordó que este paso ya se dio hace muchos años con éxito en Europa y en el norte de España y que Castilla-La Mancha como uno de los principales centros productores mundiales de vino tiene que aumentar su dimensión empresarial para poder competir en los mercados, añadiendo que “si no somos nosotros capaces de hacerlo, vendrán otros de fuera a resolvernos el problema y el resultado no será nada igual ni para el sector porque habremos perdido nuestra capacidad de iniciativa ni para nuestros pueblos”.
Del mismo modo explicó que el éxito de este tipo de iniciativas, que no son fáciles, exige un compromiso férreo y un esfuerzo sostenido en el tiempo.
El director general aprovechó su presencia en el acto para anunciar que el Gobierno de Castilla-La Mancha tiene previsto aprobar a finales de año un plan de ayudas a cinco años para la integración comercial de cooperativas con una financiación máxima de hasta 100.000 euros con el objetivo de crear estructuras de comercialización y programas de desarrollo que desemboquen en proyectos de integración total.