Los coleccionistas de relojes han pasado a otra dimensión. Ahora la tecnología es un factor clave del diseño de relojes, y por eso, los smartwatches, o relojes inteligentes, han cobrado gran importancia en el mercado de la relojería de los últimos tres años.
Antes, un producto de lujo siempre era concebido como algo artesanal y trabajado de forma manual. En la actualidad, cualquier artículo requiere un toque tecnológico para poder considerarse como algo lujoso. Según dice Blanca Panzano, directora de Moët Hennessy Louis Vuitton (LVMH) y de la firma de relojes Tag Heuer: «tradición es nunca dejar de innovar».
En este sentido, los relojes como el iWatch de la marca Apple están ganándole terreno a los míticos relojes suizos de marcas como Montblanc o Cartier. No por ello significa que el público objetivo de este mercado no esté dentro de los mercados digitales, y haga un uso cotidiano de la Red, ya que encontramos páginas web como Chrono24, dedicadas únicamente a la venta de relojes online. No obstante, aún existen muchos usuarios que valoran por encima la calidad de estos productos que la última tecnología.
Sin embargo, el público de relojes no se divide entre clásicos y modernos. También están los relojes «Skeletons» que son relojes analógicos que muestran la maquinaria que hay en el interior. Los de bajo coste y ecológicos como son los relojes de madera, son los preferidos por el público joven de entre 16 y 28 años. Se lleva lo sostenible y lo que menos perjudique al medio ambiente. La gente empieza a concienciarse por el planeta y eso se ve reflejado hasta en el mundo de los famosos: sin ir más lejos, Emma Watson, y su vestido hecho de plástico reciclado diseñado por la conocida marca de moda Calvin Klein que lució en la gala Met del pasado 1 de mayo.
Ya existen relojes para todo tipo de bolsillos y para cualquier estilo. Aun así, son los que abarcan mucho más mercado debido a su diversa variedad de diseños. Los famosos todavía apuestan por la tecnología clásica, y siguen decantándose por los relojes suizos de alta gama como Rolex, Chopard, Richard Mille, o Cartier. Son versátiles y sirven tanto para un evento importante como para una quedada más informal.
Así es como se presenta el mundo de la relojería en la actualidad. El tipo de consumidores es cada vez más selectivo y es por ello, que los diseñadores de relojes se encuentran en alerta constante. El mundo avanza y no para de cambiar.