/Conchi Ruescas/
Manuel Torrecillas recibió con “mucha sorpresa” su nombramiento como pregonero de la Semana Santa de Hellín de 2016, “no sabía nada” ha dicho a El Digital de Hellín. En un primer momento, relata, cuando el presidente de la Asociación de Cofradías y Hermandades, Francisco Juárez, lo llamó, “le dije de entrada que no porque no me veía yo en la línea de hacer eso pero se encabezonó y no aceptó el no”. Ahora siente “un reboltijo entre mucha ilusión y mucho miedo de no estar a la altura de las circunstancias”y también de “respeto por el tema”.
A su familia, cuenta, “les ha producido mucha alegría y están muy contentos, aunque me miran un poco raro”. Aunque no ha pensado aún en cómo será su pregón, Manuel Torrecillas hablará de sus vivencias, “yo viví la guerra que fue cuando se perdió todo, cuando pasó se fue recuperando hasta nuestros días que tenemos una Semana Santa muy completa, muy rica en todo, en imágenes, en las bandas de música”.
Hasta hace tres años Torrecillas no ha faltado a la Semana Santa de Hellín, dejó de ir por razones de salud, “a mi mujer y a mi nos da un poco de miedo ir porque la Semana Santa es estar para arriba y para abajo pero si que veo las procesiones a través de Internet” y se mantiene informado de todo lo que ocurre en la ciudad. Confiesa que de la Semana Santa le gusta todo, “me ha gustado mucho tocar el tambor, salir con los amigos, las comidas típicas como el mojete me encanta, las procesiones y hay imágenes que me ponen la carne de gallina como el Cristo Yacente, esa imagen es tremenda, yo creo que es uno de los Cristos más bonitos de España”. Por la Dolorosa siente también algo muy especial, “es una imagen que me llega muy dentro por mi madre, si queríamos ponerla contenta le llevaba una imagen de la Dolorosa, me emociono cuando la veo porque me acuerdo de mi madre al verla”. Además, siempre que ha podido, ha subido a almorzar al Calvario, “la la procesión ese día es muy bonita pero ese día es muy largo, es para gente que aguante bastante, cada año se hace más largo”.
Respecto a las tamboradas la que más le gusta es la del Jueves Santo por la noche y también la del Sábado de Gloria. Manuel Torrecillas le ha intentado inculcar la tradición de la Semana Santa de Hellín a su familia, la que seguro estará acompañándolo cuando lea su pregón, “si es aburrido el responsable no voy a ser yo, van a ser los que se han empeñado en que haya sido yo”.
