En estos últimos años, las apuestas deportivas online han entrado a formar parte de la normalidad en nuestro país. La regulación por parte del Estado de esta actividad en 2011 con la publicación de la Ley de Juegos de Azar, supuso automáticamente el que una serie de operadores se suscribieran a dicha ley y, tras pertinente aprobación de licencias, estuvieran en disposición de ofrecer sus servicios desde España. Para las arcas del Estado, esta regularización también supuso el que el capital generado por esta industria en nuestro país comenzara a pagar sus impuestos en suelo patrio.
El número de operadores con licencia ronda ya la veintena desde que la Dirección General del Juego concediera las primeras en junio de 2012, lo que sin duda ha redundado en una mayor seguridad y garantía para los usuarios. Aunque cada empresa pueda tener su propio modelo de negocio, cuotas para apostar, selección de apuestas, bonos, métodos de pago o atención al cliente, todas ellas deben de seguir las exigentes pautas que marca la ley, incluyendo los mecanismos pertinentes de aviso sobre el riesgo que el juego puede acarrear desde una perspectiva ludópata.
En un país como el nuestro donde el deporte en general (y no solo el fútbol hay por ejemplo William Hill, apuestas de tenis) concita tanto interés, la posibilidad de realizar apuestas en un sinfín de deportes, eventos y modalidades de apuestas unido a la generalización del uso de las nuevas tecnologías en nuestras vidas ha significado el que sean cada vez más los españoles que apuesten en internet. Además, la posibilidad de realizar apuestas en directo sobre el evento de tu elección o tener acceso a dichos eventos en la tableta o el móvil en live streaming, no dejan de ser importantes alicientes para acceder a una actividad que no deja de crecer año tras año en nuestro país. ¡ A seguir apostando pues !
