El director general de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha ordenado al general jurídico del Cuerpo que «inicie las acciones legales oportunas» y traslade a la Fiscalía las declaraciones del diputado de IU Alberto Garzón en las que acusaba al Gobierno de enviar a guardias civiles a «asesinar inmigrantes en la valla de Melilla» por si «pudieran ser constitutivas de delito».
Según ha informado el Instituto Armado, Fernández de Mesa ha calificado las declaraciones de «inadmisibles» y cree que reflejan «el desconocimiento más absoluto de la labor que a diario realizan los guardias civiles que trabajan en las vallas de Ceuta y Melilla».
Y ha destacado que los agentes trabajan con «respeto escrupuloso a la legalidad» y «al Estado de Derecho y con total humanidad» defendiendo las fronteras de «la inmigración ilegal, violenta y masiva».
El director del Cuerpo ha instado a Garzón a «conocer la realidad» de cómo trabajan los guardias civiles y no dejarse llevar por «ciertas manipulaciones» antes de hacer declaraciones que ha calificado de «ofensivas desde todos los puntos de vista».
RECONOCIMIENTO A LOS QUE RESCATARON A ESPELEÓLOGOS
Fernández de Mesa se ha reunido este jueves con mandos de la Guardia Civil en la Zona de Andalucía en Sevilla y ha manifestado su apoyo «incondicional» a todos los guardias civiles, porque trabajan «en beneficio de la sociedad a la que sirven», y especialmente a los que trabajan en Ceuta y Melilla.
También ha dedicado un reconocimiento especial a los agentes que «durante 26 horas ininterrumpidas rescataron en el Atlas marroquí los cuerpos de dos espeleólogos españoles», a los integrantes del Servicio Aéreo y de Montaña que murieron en agosto pasado mientras rescataban a un senderista accidentado en los montes de León, y al agente de la Agrupación de Tráfico que falleció en un accidente mientras abría camino en una etapa de la vuelta ciclista a España en Asturias.