El consejero de Hacienda de Castilla-La Mancha, Arturo Romaní, ha avanzado que el 95,16 por ciento del gasto contabilizado en el Presupuesto de 2014 “ya está pagado”.
“Según los datos a fecha 30 de diciembre, el 95,16 por ciento del gasto contabilizado en el Presupuesto de 2014 está pagado”, ha afirmado Romaní, quien ha afirmado que “en Castilla-La Mancha ahora se gasta lo que se puede pagar, y esto se hace con unos presupuestos reales, veraces y que tienen ingresos suficientes para asumir los gastos”.
A juicio del titular de Hacienda, uno de los problemas más graves que ha padecido Castilla-La Mancha ha sido el de la morosidad pública. “Hemos tenido que vivir con una Junta de Comunidades que no pagaba o que tardaba muchísimo en pagar”, ha señalado en un comunicado.
“Ese problema gravísimo de morosidad pública era fruto simplemente de unos presupuestos desequilibrados, que gastaban mucho más de los ingresos que había y unos presupuestos que gastaban lo que no se podía pagar”, ha manifestado el consejero.
GASTAR LO QUE SE PUEDE PAGAR
En el trabajo que se ha llevado a cabo por parte del Gobierno presidido por María Dolores de Cospedal para “encarrilar las finanzas públicas”, ha explicado Romaní, “una de las premisas ha sido aplicar una regla básica que todo el mundo entiende: gastar lo que se puede pagar”.
“Una de las pruebas más evidentes de que un Presupuesto es real y equilibrado es el grado de pago, que está en un nivel altísimo, como lo demuestra el hecho de que el 95 por ciento del gasto esté pagado”, ha afirmado.
En ese sentido, Romaní ha defendido que la característica más importante de la gestión del actual Ejecutivo autonómico es que “ahora en Castilla-La Mancha lo que se gasta, se paga”.
“Los desequilibrios que se producen cuando se gasta más de lo que se puede pagar se traducen en incremento de deuda, morosidad pública, proveedores con facturas pendientes. Afortunadamente, todas esas prácticas se han desterrado con el Gobierno de Cospedal, mejorando de forma sustancial los plazos de pago”, ha concluido Romaní.
