Esther Sotoca
Con el paso de los años cambian las modas, las costumbres y las formas de vida. En los últimos tiempos hemos visto nacer nuevas profesiones, pero también desaparecer otras. Uno de los oficios que se resisten a ser devorados por las grandes cadenas de “confección a granel”, es el de sastre.
Albacete puede presumir de contar todavía con esta mezcla de profesión y arte. Desde 1956, en el establecimiento de Sastrería Bautista, se dedican a vestir a medida a los albaceteños que buscan la perfección en su vestuario y el lucir una prenda única, hecha exclusivamente para ellos.
Víctor García Muñoz, uno de los propietarios de Sastrería Bautista y encargado de la confección a medida, explica que “hay varios perfiles de personas que buscan ropa a medida. Están los que la buscan porque no encuentran de confección, y luego están los caprichosos que se la hacen porque saben que van a conseguir unos tejidos de mayor calidad”
La elegancia de las prendas artesanas se encuentra más en el armario de los hombres. Ellos buscan la exclusividad principalmente en camisas, trajes y trajes de novio. Así, podemos conseguir una camisa a medida diseñada para nosotros a partir de los 105 euros o un traje a partir de los 900.
Estos precios tienen su razón en el elaborado trabajo artesanal que conlleva crear una prenda a medida. El proceso se inicia con la elección de la tela, se toman las medidas y se comienza la elaboración. Después llega la primera prueba, que dará paso a hacer los delanteros, el cuello y las mangas. Tras estos pasos es el momento de la segunda prueba y dar los últimos retoques al trabajo. Este complicado trabajo requiere muchas horas, pero también muchas manos profesionales como cuenta Víctor: “Intervienen muchas personas porque uno corta, otro pone el cuello, otro pica solapas, también hay una persona dedicada a hacer ojales…”
El resultado es una prenda única, exclusiva e incomparable con las ya fabricadas. De hecho no se pueden buscar diferencias entre una prenda ya fabricada y una hecha a medida porque esta última es diferente por ella misma. “Todo es diferente, primero porque una prenda hecha a medida se hace a mano, y a partir de ahí todo cambia, sobre todo en las calidades, porque ya no solo es lo que se ve por fuera, sino los forros que llevan, las telas, etc.”, según afirma Víctor.
Es la apuesta por la calidad, que a veces olvidamos en busca del ahorro, que en muchas ocasiones sale caro. Cari García Muñoz, copropietaria del negocio, asegura que “Nadie da duros por pesetas y a veces comprar barato sale caro. Hay prendas que merecen la pena porque perduran en el tiempo y las puedes lavar y planchar las veces que quieras”
Por eso un buen regalo para las próximas fechas pude ser una prenda hecha a medida o de marca, ya que a la hora de buscar regalos no se mira tanto el bolsillo, como cuentan los propietarios de ‘Bautista’. Los complementos son lo más buscado para estas ocasiones, y en este sentido Cari les aconseja a los clientes que “una prenda de marca o hecha a medida combinada con una prenda más barata, siempre da un toque de elegancia que no se consigue de otra manera”.
Aunque la oferta es amplia, y cada vez más las grandes cadenas de moda nos proponen vestir todos con las mismas prendas y diseños, afortunadamente siguen existiendo opciones en Albacete que complementan esa oferta, dando un toque de personalidad y elegancia.