/Llanos Esmeralda García/
La sección segunda de la Audiencia Provincial de Albacete iniciará el próximo lunes un juicio contra ocho personas acusadas de tráfico de drogas y blanqueo de capitales. Para ellos la Fiscalía solicita penas de entre 4 y 13 años de prisión. Para el principal acusado, J.L.V.P., Fiscalía pide 8 años de prisión y multa de 600.000 euros ante un delito de tráfico de drogas y 5 años de cárcel por blanqueo de capitales, además de una multa de 200.000 euros. Para otro de ellos, C.F.V., el fiscal pide una pena de 7 años de prisión y multa de 600.000 euros por tráfico de drogas que causan grave daño a la salud. Otros cinco acusados se enfrentan a penas de cárcel de 4 años y multas que van desde los 800 a los 8.000 euros por traficar con drogas. El octvo acusado de blanqueo de capitales, I.G.H., Fiscalía le pide una pena de 4 años de prisión y multa de 200.000 euros.
Hechos
Según el escrito de acusación, al que ha tenido acceso El Digital de Albacete, los acusados J.L. V.P. y C.F.V., se dedicaban desde al menos 2013, al tráfico y venta de cocaína. Por estos hechos, detalla dicho escrito, se establecieron dispositivos de vigilancia policial en los que se pudo observar cómo sobre las 12.30 horas del 4 de julio de 2014, en la calle Caldereros de Albacete, “C.F.V., hizo entrega a J.L.V.P. de 99,52 gramos de cocaína, que a su vez J.L.V.P. vendió en el interior de un parking, al acusado A.P.P. quien abonó 1.960 euros que, iba a ser destinada a su vez por A.P.P. para la venta y que alcanzaría un valor de 3.620,35 euros”.
Ante la existencia de indicios de que J.L.V.P. y C.F.V. pudieran haber adquirido una importante cantidad de cocaína para vender a clientes, a su vez traficantes, se acordó la entrada y registro en una vivienda y dos establecimientos hosteleros en propiedad de J.L.V.P.
En el registro del garaje de la vivienda, establece el escrito del fiscal, se encontraron “8 moldes de madera, una máquina de envasar alimentos al vacío, una prensa hidráulica y demás material así como en una habitación contigua al garaje, bolsas de plástico para envasar al vacío, una balanza digital de precisión con restos de cocaína, una bolsa de plástico con cocaína en roca, con un peso de 107 gramos, dos trozos en roca de cocaína de 3 y 4 gramos respectivamente, un cúter, diversos blister de pastillas, una bolsa que contiene en su interior cocaína en roca con un peso de 27 gramos, un envoltorio cerrado con cuerda negra con 6 gramos de cocaína, una bolsa con una porción de 55 gramos de cocaína en roca, otra bolsa similar con una porción de cocaína de 51 gramos y otra porción de 1 gramo de cocaína. En el salón de la vivienda fueron hallados 6.750 euros en billetes de 200, 100 y 50 euros, una Blackberry y un teléfono modelo Iphone de color negro, hallando en un cajón del armario 125 euros en billetes de 5 y 10 euros”.
Se procedió al registro del trastero hallando en el interior “dos prensas metálicas, una báscula de precisión, 9 botellas de litro de éter etílico, cinco planchas metálicas y un molde metálico con cuatro piezas, un gato de carpintería, dos botes de 2 kilogramos de cafeína, 6 botes de un kilogramo de lidocaina, diversos moldes y planchas, un molinillo con restos de cocaína y demás utensilios de precisión así como dos bolsas de cocaína de 287 gramos, otra con cocaína compacta de 531 gramos, otra de 683 gramos, una bolsa blanca con 549 gramos de cocaína, un paquete envuelto en una bolsa de plástico envasada al vacío con un peso de 1.170 gramos, un bloque compacto de cocaína de 1.180 gramos, un paquete rectangular de cocaína prensada de 730 gramos, una mochila de deporte en cuyo interior había además de diversas pastillas, dos bolsas que contenían 17 y 60 gramos de cocaína, 93 pastillas de éxtasis, entre otros efectos. La cocaína intervenida en los registros, detalla Fiscalía, arrojó un peso neto total de 3.732,44 gramos. Las sustancias estupefacientes intervenidas estaban “destinadas por J.L.V.P. y C.F.V. al tráfico y venta a terceras personas y alcanzaban un valor en el mercado ilícito de 274.952,97 euros”. Las demás sustancias y efectos intervenidos estaban destinados por los dos acusados, dicta el escrito, “a la elaboración, corte y tratamiento de la cocaína antes de proceder a su venta a otros traficantes y a consumidores. El dinero intervenido en los registros procedía del tráfico ilícito al que se dedicaban los acusados. Ambos acusados, en los desplazamientos que efectuaban para aprovisionarse de la cocaína que posteriormente vendían, utilizaban un vehículo Mercedes modelo CLA, un automóvil marca Masseratti y una motocicleta marca MV Augusta”.
En la parcela titularidad de J.L.V.P. se intervino más material para el tratamiento de la droga además de 100,27 gramos de marihuana. “Los instrumentos y efectos aprehendidos eran destinados por los acusados J.A.T. J. y D.T.C. a la elaboración, corte y tratamiento de cocaína antes de proceder a su venta a otros traficantes y a consumidores”, incide el fiscal. La cocaína intervenida a J.A.T.J. tenía un valor en el mercado ilícito de 3.906, 45 euros y la marihuana de 463,24 euros.
Por contra, en el registro del domicilio de A.B.L. se intervino 2.720 euros “procedentes de cocaína, además de diversos papeles con anotaciones numéricas vinculadas a nombres de adquirentes de cocaína. En el registro de la empresa de éste fueron halladas varias bolsas con recortes circulares, destinados a la elaboración de dosis de cocaína, un rollo de alambre plastificado y una bolsa de plástico transparente de envasar al vacío, con restos de cocaína, empleada para guardar la sustancia estupefaciente a cuyo tráfico ilícito se dedicaba”.
En el registro del restaurante propiedad de D.T.C. fueron intervenidas “tres agendas y una libreta con anotaciones numéricas vinculadas a nombres de adquirentes de cocaína”.
Por su parte, el acusado A.B.L. supuestamente participaba en el aprovisionamiento de cocaína para su venta con los acusados J.L.V. y C.F.V.
El acusado I.G.H., actuando de común acuerdo con J.L.V.P. constituyeron una sociedad mercantil con la finalidad “de tratar de ocultar el origen ilícito del dinero que obtenía como beneficio del tráfico de drogas J.L.V.P., adquiriendo a nombre de la sociedad varios vehículos de los que era propietario J.L.V.P.”, detalla el escrito de acusación. A través de la referida sociedad de responsabilidad limitada, el acusado J.L.V., “también explotaba dos establecimientos de hostelería en la capital camuflando de esta forma el origen ilícito del dinero que obtenía del tráfico de drogas, simulando ser beneficios de los establecimientos”.
