Salud Pública y AECC ofrecen cursos en Albacete para dejar de fumar

/Sandra Manzanares/Fotos: María Guerrero/

Salud, independencia y ahorro económico son solo algunos de los beneficios que el abandono del tabaco trae aparejados. Y es que, para un fumador que al día consuma un paquete de cigarros, dejar a un lado este hábito puede suponerle un ahorro de más de 100 euros al mes; además, reduce la posibilidad de sufrir enfermedades asociadas con el tabaquismo como pueden ser el cáncer de pulmón o los problemas cardiacos. Algo que también valoran y mucho los fumadores es el hecho de “no estar atado” al tabaco, así nos lo explican desde la Asociación Española Contra el Cáncer, AECC y desde la Unidad de Tabaquismo de Salud Pública.

Además del deporte, uno de los propósitos de año nuevo suele ser el de dejar de fumar, para lo que desde la AECC ofrecen un programa “estructurado y eficaz” que dio comienzo el pasado miércoles 18 de enero. Se trata de unos grupos de tratamiento de deshabituación de tabaco impartidos por profesionales de la psicología que ofrecen estrategias para poder llevar a cabo el abandono de este hábito a través de técnicas de motivación, control de estímulos, manejo del estrés o prevención de la recaída.

Como nos cuenta la responsable de los cursos de deshabituación tabáquica en AECC, María José Fernández, cada uno de ellos consta de 6 sesiones, uno por semana, complementados con los seguimientos correspondientes, y la atención individualizada en los casos donde se precisa. Con este programa se pretende que los fumadores tomen conciencia de su hábito y de porqué fuman, una vez establecido y registrado el consumo, se inicia una reducción gradual para que el cuerpo se acostumbre a recibir menos nicotina. Finalmente, se incorporarían unas estrategias para el control posterior de la posible sintomatología asociada al abandono del tabaco como puede ser el síndrome de abstinencia.

En este punto, las técnicos de Salud Pública que forman la Unidad de Tabaquismo de la Conserjería de Sanidad; Llanos, Laudina, Dolores y Katia, resaltan que, precisamente la sintomatología asociada al abandono del tabaco es una de las principales preocupaciones de la gente a la hora de dejar de fumar para lo que les recomiendan que se informen pues es “importante tener claro que el síndrome de abstinencia es temporal y transitorio”. De esta manera, y sabiendo que “se va a pasar afrontamos las estrategias con una tranquilidad mayor”, apunta Katia.

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Además, reflejan que ganar peso es otra de las evasivas que los fumadores utilizan para retrasar el proceso de dejar de fumar, y es que, “se puede producir una ganancia de 3 o 4 kilos de media”, reconoce Dolores, pero “hay quienes no cambian el peso”. En cualquier caso, lo ideal sería “cuidar los hábitos”, pero no hacer dieta porque resulta “contraproducente” tanto para el cuerpo como para la mente realizar un esfuerzo doble de dejar de fumar y ceñirse a una dieta. En este aspecto, el temor a recaer en el tabaquismo, ocupa un espacio importante en los pensamientos del fumador, para lo que desde Salud Pública les aconsejan planificación para así ir “por delante en lo que puede pasar y prever situaciones donde pueda haber mayor riesgo”, concluye Laudina.

Cursos Asociación Española Contra el Cáncer

Cabe destacar que durante el pasado año se realizaron 8 cursos, a los que acudieron 96 personas, la mayoría de ellas mujeres en torno a los 40 o 50 años, cada vez pacientes más joven. Este predominio de féminas, María José puede relacionarlo con que a las mujeres “nos cuesta menos buscar ayuda” mientras que el hombre “lo hace más frecuentemente por su cuenta”, claro que también se ha producido un “aumento importante” de mujeres fumadoras. En este sentido, la psicóloga ha querido poner en valor el “éxito” del programa pues al acabar el curso, un 60 % de fumadores consiguen su objetivo.

Talleres Salud Pública

Estas acciones llevadas a cabo por la Unidad de Tabaquismo comenzaron el martes día 17 de enero, con una lista ya cerrada, pero en poco tiempo se empezarán a dar respuesta a otras ya que hay más de 20 personas apuntadas para llevar a cabo 2 talleres. Cada uno de estos talleres cuenta con 5 sesiones, una por semana, menos la última que se realiza con una distancia entre sí de 3 semanas con el objetivo de evaluar al fumador en sus primeros días de abandono del tabaco.

Cabe recordar que desde que comenzaran estas actividades en 2.011 y hasta 2.017, se han realizado 36 talleres con 420 pacientes convocados, de los que 181 han sido hombres y 239, mujeres, detalla Llanos, responsable de la Unidad de Tabaquismo. Así, Llanos ha apuntado que desde Sanidad se emplean recursos “útiles” para dejar de fumar, incluido el tratamiento farmacológico, uno de los factores de esta terapia multicomponente basada en técnicas de modificación de conductas, que se combinan con materiales de autoayuda y con el apoyo tanto del médico como del grupo. Con todo ello se consiguen unas cifras de abstinencia a los 12 meses de hasta el 40% de los fumadores, siendo mínimo el porcentaje de abandono, apenas un 5%.

 Un intento más

Según estudios relacionados con el tabaquismo, se necesitan de media de 3 a 4 intentos para conseguir el abandono definitivo, por lo que Llanos ha querido trasladar un mensaje a aquellos que se encuentran inmersos en la lucha contra el tabaco y es que “la recaída no sea un motivo de abandono” algo, continua la responsable de la Unidad, que les lleve a “sentirse culpables”.  Ante todo, comenzar el proceso de dejar de fumar “tiene que ser una oportunidad para aprender” y si no se consigue del todo a la primera, hay que retomarlo de nuevo como una oportunidad que ayude a ver “en qué he fallado”. Y es que, “tenemos que desaprender para volver a aprender”, y, para, como dicen las expertas, “hacer las actividades de la vida diaria sin el tabaco”. Algo que, sin duda, se consigue con la práctica.

Para todos aquellos que estén interesados en dejar de fumar pueden dirigirse a su médico de atención primaria, a la AECC a través del teléfono 967/50-81-57 o a Sanidad, en el 967/55-79-00, a la Unidad Especializada de Tabaquismo del Perpetuo Socorro o a la Unidad de Conductas Adictivas que depende del servicio de psiquiatría, todos ellos recursos ofrecidos a los albaceteños que cada vez tienen menos excusas para continuar fumando.

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