A partir de este lunes, 30 de noviembre, y hasta el viernes, 4 de diciembre, se va a desarrollar en Castilla-La Mancha una campaña especial de tráfico dedicada al control del transporte escolar a fin de concienciar sobre la seguridad en este tipo transporte que tiene características especiales.
Así lo ha anunciado el delegado del Gobierno en la región, José Julián Gregorio, que en rueda de prensa ha destacado los datos “aceptables” que existen en cuanto a siniestralidad en este tipo de transporte, fruto de las campañas que se hacen y del “excepcional” de trabajo de la Guardia Civil de Tráfico.
Y es que ha puesto en valor que en el año 2014, solo se registraran dos accidentes en Castilla-La Mancha en los que están involucrados autobuses de transporte de menores: uno en vía interurbana (con dos heridos leves) y otro en vía urbana (con cuatro heridos leves), ambos en la provincia de Toledo. Mientras, en el año 2015, y de forma provisional, ha habido un accidente en vía urbana en Albacete, con cinco heridos leves.
Gregorio ha indicado, no obstante, que más del 60 por ciento de los 17.000 autobuses que en el país realizan este tipo de transporte tienen instalado cinturón de seguridad.
Dicho esto, ha señalado que la instalación de este dispositivo de retención es solo obligatorio en los autobuses de nueva matriculación, aunque en 2023 todo los vehículos destinado a este tipo de servicio tendrán que disponer de este elemento de seguridad.
Así las cosas, ha dicho que los autobuses que no disponen de este dispositivo tienen que tener contratado un seguro de responsabilidad civil ilimitado.
CAMPAÑA
Durante la campaña de sensibilización se realizarán inspecciones sobre los vehículos, especialmente en carreteras convencionales y en vías urbanas: autorizaciones y documentos, condiciones técnicas y elementos de seguridad y cinturones y sistemas de retención, así como sobre los conductores, especialmente en carreteras convencionales y en vías urbanas: permiso de conducción, tiempos de conducción y descansos.
Por todo ello, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil procederá a realizar entre el lunes y el viernes de la próxima semana el control del transporte escolar. “Dada la importancia de este transporte en zona urbana, la participación de los Ayuntamientos en esta campaña tendrá una relevancia extraordinaria”, ha subrayado Gregorio.
El representante del Ejecutivo central en la región ha recordado que desde el curso escolar 2007-2008 todos los vehículos dedicados al transporte escolar deben cumplir los requisitos que se recogen en un Real Decreto de 2001 sobre condiciones de seguridad en el transporte escolar y de menores.
En él se establecen diversos requisitos, como la obligatoriedad de que los menores vayan acompañados en el autobús por una persona debidamente cualificada, la antigüedad máxima de 16 años de los vehículos destinados a este tipo de pasajeros, el seguro de responsabilidad civil ilimitado y la obligatoriedad de llevar señal de transporte escolar, entre otros, de singular importancia.
Así las cosas, ha agregado que el 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar a nivel nacional tienen lugar en el momento de subir o bajar del vehículo o en los instantes inmediatos y en muchos casos se trata de atropellos causados por una distracción del menor, del conductor del transporte escolar o de los acompañantes.
En caso de accidente, ha dicho que nueve de cada diez lesiones infantiles graves o mortales podrían haberse evitado si se hubiera utilizado este tipo de dispositivos.
De igual modo, ha concluido manifestando que está comprobado que a 50 kilómetros/hora, velocidad máxima permitida en vías urbanas, las posibilidades de que un niño sobreviva sin ninguna medida de seguridad es prácticamente nula y que ni siquiera a poca velocidad se garantiza su supervivencia.
