El ministro de Fomento, Íñigo De la Serna, ha manifestado la voluntad del Gobierno de “continuar con el esfuerzo inversor” para la construcción de la futura vía A-32, la autovía que unirá Albacete con Linares (Jaén). “Vamos a continuar haciendo ese esfuerzo inversor con la aprobación de los proyectos porque el compromiso es máximo”, ha dicho el ministro en la sesión plenaria del Senado que ha tenido lugar este martes.
El titular de la cartera de Fomento ha dejado claro que el Gobierno está “trabajando intensamente” con su “compromiso” con la A-32 que consisten en una serie de obras que, en su conjunto, “suponen una inversión de 1.260 millones de euros” y que, según ha afirmado, “van a mejorar la conexión entre Jaén y Albacete”.
Además, ha explicado que el proyecto de la infraestructura se ha dividido en 14 tramos, ocho en Jaén y seis en Albacete, de los cuáles “dos ya están en servicio, cuatro están en estos momentos en obras y el resto están en proyecto”. Así, De la Serna se ha comprometido a “continuar con la ejecución de las obras” y “seguir avanzando” en la redacción de los proyectos que no están todavía en ejecución.
De la Serna ha respondido así a una pregunta planteada en el pleno por la senadora del PSOE Matilde Valentín, quien ha interpelado al ministro sobre sus planes para completar dicha carretera y ha mostrado una pancarta donde se podía leer “A-32 ya”. El ministro ha dicho que ante la pancarta el se “suma” al mensaje de “A-32 ya” pero ha dicho que no entiende por qué el PSOE “apoya semejante mensaje” si la carretera en cuestión fue “paralizada” por el Gobierno socialista en sus tiempos.
“La A-32 comenzó el 2001 con un gobierno del PP que arrancó el estudio informativo. Después, el primer gran paso que hizo el PSOE en 2009, es no hacer absolutamente nada salvo coger las tres actuaciones que había e ir al Congreso a decir que se iban a paralizar y que se iban a rescindir los contratos de la unión entre Jaén y Albacete”, ha dicho De la Serna al tiempo que ha remachado que el PSOE “fue el que paralizó las obras de la A-32”.
Por su parte, la senadora del PSOE por Albacete, Matilde Valentín, ha advertido de que “esta obra no admite ni más demoras, ni más excusas”, al tiempo que se ha mostrado convencida de que “la sociedad albaceteña está esta tarde muy pendiente de su respuesta”. “Espero que no nos defraude. Haga usted algo positivo y comprométase con la provincia de Albacete”, ha apostillado
Valentín ha recordado al titular de Fomento que el pasado martes se celebró una concentración en Albacete, convocada por UGT y CCOO, para reclamar al Ejecutivo le ejecución inmediata de las obras de los tramos del trazado de la autovía que discurren por la provincia castellano-manchega, y ha subrayado que en dicha convocatoria participaron representantes de todos los partidos políticos, del gobierno autonómico, de la Diputación Provincial y de los ayuntamientos afectados por el trazado, y ha hecho hincapié en que el ayuntamiento de Albacete estuvo representado por su Alcalde. “Que les recuerdo es del PP”, ha puntualizado.
Asimismo, ha reprochado a la De la Serna que la finalización de la A-32 está pendiente desde “hace más de 20 años” y ha recalcado que en la provincia de Albacete “solo hay un tramo en funcionamiento”, ejecutado en el año 1995, que es la variante Oeste de la ciudad. “Usted es consciente de la importancia de esta obra para unir Andalucía, Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana, y para establecer un nudo de comunicaciones entre el Sureste español, el Corredor Mediterráneo y el Sur de Europa”, ha enfatizado.
En este sentido, Matilde Valentín ha defendido que la terminación de esta infraestructura es “vital” para la provincia de Albacete: “para mejorar la seguridad vial de la N-322, con unos índices altos de peligrosidad muy elevados; para luchar contra la despoblación que sufre la Sierra de Alcaraz en varias zonas; para ofrecer una alternativa económica y vertebradora a los más de 360.000 ciudadanos a los que beneficia esta autovía; y, porque el itinerario desde Andalucía a Levante se acorta, suponiendo una enorme ventaja para el tráfico pesado, y una mejora medioambiental por la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero”.
