/Hugo Piña/
El central de Tandil Esteban Saveljich se está erigiendo como el jugador más relevante del Albacete Balompié en este primer tramo de competición y que además está suponiendo el regreso de la entidad al fútbol profesional.
No en vano, el potente zaguero que se encuentra en calidad de cedido por el Levante UD de la Primera División para esta temporada, ha jugado los once encuentros de liga que hasta la fecha se llevan disputados como titular. Es además, el único que lo ha conseguido de todo el plantel albacetista en este primer tramo de competición en la división de plata.
Y es que tanto con Aira Lindoso como con Martín Monreal ha sido, Saveljich, el futbolista que ha culminado una defensa que ha visto como ha variado en multitud de ocasiones de dibujo táctico. Con tres, con cuatro y hasta con cinco ha venido jugando un Alba que ha ‘buscado’ desarrollar el tremendo potencial defensivo que posee con hombres de marcada experiencia como la del propio Esteban Ariel pero en la que siempre, hasta el partido en León había tenido insuficiencias que le habían hecho encajar hasta diecisiete goles en contra.
Saveljich y diez más en la primera fase del curso en el Albacete Balompié, jugando de inicio los once partidos que hasta la fecha se llevan y disputando, según cifras de La Liga, un total de 972 minutos en total. Ha superado incluso a Jon Erice, que venía siendo el jugador más utilizado por los dos técnicos que hasta el día de hoy se han sentado en el banquillo de la escuadra manchega. Y es que el defensor argentino con pasaporte montenegrino ha despuntado con la maduración de la competición, advirtiéndose rápidamente del enorme potencial físico y sobre todo táctico que posee cuando se calza las botas de tacos.
Tan solo se ha perdido 18’ minutos del total de los once partidos de liga disputados, siendo sustituido en la segunda fecha, ante el Córdoba por Bíttolo. Desde entonces, Saveljich lo ha jugado absolutamente todo en la zaga del Albacete Balompié, que por cierto, ha comenzado ahora a recoger los frutos a nivel defensivo de su gran trabajo diario desde que llegase el navarro Enrique Martín.
