- El ‘Observatorio Regional’ de una entidad bancaria ha incrementado tres décimas el crecimiento del PIB de la región para este ejercicio respecto al último informe que publicó el pasado mes de mayo.
- El Ejecutivo castellano-manchego abona las facturas a sus proveedores en 19 días, antes que la media nacional y cumpliendo el periodo legal de pago.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha valorado hoy que las últimas previsiones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) de la región para este ejercicio se incrementen, lo que permitirá que la Comunidad Autónoma crezca por encima de la media nacional este año.
El Ejecutivo regional se ha referido así al ‘Observatorio Regional’, que prevé que la economía de Castilla-La Mancha crezca este año un 3,4 por ciento.
Con esta estimación se incrementa en tres décimas la previsión de crecimiento de Castilla-La Mancha respecto a su último informe regional, publicado el pasado mes de mayo, en el que estimaba que la economía regional crecería en el ejercicio de 2017 un 3,1 por ciento.
Esta previsión de crecimiento supone también que el PIB de la región crecerá por encima del conjunto de comunidades autónomas, ya que la previsión de crecimiento a nivel nacional asciende al 3,3 por ciento.
Un crecimiento superior a la media nacional que, también se mantendría el próximo año, cuando el PIB de Castilla-La Mancha se incrementaría un 2,9 por ciento y el de España un 2,8 por ciento.
Estas previsiones coinciden con otras de diferentes gabinetes de estudio económico, como la del Centro de Predicción Económica (Ceprede), que también para 2017 estima un crecimiento de la economía regional del 3,3 por ciento, mientras que para la media nacional este porcentaje disminuye hasta el 3 por ciento.
Pago a proveedores
Además, el Ministerio de Hacienda y Función Pública ha publicado hoy los datos correspondientes al periodo medio de pago a proveedores del pasado mes de mayo, un mes en el que Castilla-La Mancha abonó sus facturas en 19,95 días.
El periodo medio de pago a proveedores en la región se sitúa por del plazo legal de pago a proveedores, establecido para las administraciones públicas en 30 días, además de ser inferior a la media de las comunidades autónomas para ese mes.
Igualmente, Castilla-La Mancha ha reducido ocho días el periodo medio de pago a sus proveedores respecto a hace dos años.
